Este cuento fue escrito por alguien que acaba de partir y lo ha dejado conmigo, entonces lo hago público, para que lo disfruten.

El caso único del doctor Heriberto Gonzalo Álvarez Gil de Cuarta

Hay quienes sospechan que a Heriberto Gonzalo Álvarez Gil de Cuarta el título abogado se lo obsequio su acaudalado progenitor al cumplir veinte años. Veinte años de cursar la carrera. Mas también será justicia decir que si bien el ejercicio de la profesión duro lo que un relámpago, su actuación en el caso único en que intervino como abogado defensor lo hizo sin lucrar en lo mas mínimo con el titulo que tanto le había costado conseguir ( a su padre). Puedo dar fe que asumió la defensa de Boris Estanislao Karankanfunfa, un obrero que había estrangulado a su pareja por equivocación. Haciendo expresa renuncia de los honorarios que pudieran corresponderlo, gesto que honra su meteórico paso por los estrados de la justicia. El caso fue que llegando a la última audiencia del juicio y cuando tanto el fiscal como lo jueces estaban de acuerdo en condenar a Boris Estanislao Karankanfunfa a catorce años de prisión, el Doctor Heriberto Gonzalo Álvarez Gil de Cuarta solicito la comparencia del último testigo de la defensa, era la carta que el abogado guardaba celosamente para la audiencia final y lograr con ella la absolución de Boris Estanislao Karankanfunfa. El tribunal escuchó atentamente al testigo presentado y entonces, de común acuerdo con el Fiscal resolvió rever el fallo que estaban estaban a punto de dictar y le dieron un año mas.