Lenta y suavemente, el viento define tu silueta te crea la luz del alba te recorren en infinitos pasos de seda los solares rayos y mis dedos. Intento descubrir, el misterio inagotable de la mar calma y tempestuosa que aguarda entre tu piel y tu alma Es una llamado antiguo y primitivo Tu nombre, Lorena me invoca y me pierde dichoso entre tu sexo, tus ojos. Un grito trasciende las pulsaciones galopantes de esta Rosa que se abre de este jardín que nos rodea y estalla Colores germinados, aromas imposibles ya creados Mis dedos te recorren y el cielo se cae pedazo a pedazo beso a beso abriéndonos paso al infinito
Texto agregado el 07-03-2014, y leído por 89 visitantes. (1 voto)