Europa...

Jamás imaginé que los jardines podían florecer bajo nubes grises en Invierno...
Jamás pensé en descifrar el mensaje de aquellos vientos lejanos que sacudían mi mente.
Eran sus voces un sutil llamado desde un horizonte perdido.
Ecos golpeando mi pecho... sacudiendo paradigmas en esta tierra que parece tan ajena.
Sin embargo, nunca quise escucharlos. Solo sabía que existían...
Jamás advertí que ellos anhelaban mi llegada... de hecho, sabían mi nombre, conocían mi historia... Estaba impregnada en sus sonidos, en ella se descifraba mi destino.
Aunque era extraño... un extraño, pero así lo era...

Y fue entonces aquella mañana, aquella cuando los jardines despertaron de su letargo, los colores renacieron, mientras el cielo se pintaba de gris y la lluvia cantaba en las calles, mi alma alborotada saltaba de alegría al descubrir sus secretos...
aunque era extraño... un extraño, pero así lo era...

Jamás imaginé que aquel jardín lejano me robaría una sonrisa y por un instante me pertenecería.
Jamás imaginé que los jardines florecían también bajo tormentas y lluvias, pintando esperanza.

Jamás imaginé que aquel jardín me robaría una sonrisa y por un instante me pertenecería, los ocres, los azulados, los amarillos, los "verdados" y tantos otros también se sonrieron...
Jamás imaginé que los jardines florecían sobre tormentas y lluvias pintando esperanza... aquello también era extraño...
Jamás imaginé que los jardines también florecen en mi alma bajo nubes blancas en este hermoso invierno...