Una lágrima rodaba por su mejía, acostada en esa camilla de hospital parecía un ángel, aun mas por la palidez de su piel debido a la pèrdida de sangre. Kevin miraba a su novia incrèdulo de lo que estaba ocurriendo, pues no podía entender porque alguien había sido capaz de atacar a Denise tan atrozmente por robarle el anillo de compromiso que èl le habia entregado la noche anterior.
Denise lo miró suplicante, èl se acerco, la besó en los labios y luego le susurró al oido: Mi amor, estarè esperando por ti.
Fueron pocos segundos pero Kevin sintió que el tiempo se habia detenido y sin saberlo, su vida tambien se detuvo en ese instante.
Ingresaron a Denise al quirófano y durante nueve horas Kevin luchó contra sus temores, lloró inconsolable, maldijo, luego oró, sintió que habian pasado muchos siglos cuando vio salir al mèdico, unicamente lo miró y con esa mirada Kevin comprendió que su novia había muerto.