Imagínate sentada, clavada en tu silla paralizada enfrente de la pantalla luz blanquiazul Detras del susurro de viento envuelto en cortina abierta un sonido serpeando de pisadas lentas en el pasillo El aire, de repente escalofriante acaricia tu cuerpo tropical dolor sentimental un lento remolino de cábala sensual Revolotéo detras de tí fantasma, deseo cifra del misterio soplando mi respiro antiguo encendido Casi, casi logro alcanzar tu espalda despojada pero mi aspiración de alma desnuda se desploma en cenizas un polvo que se pisa Solo dejo como rastro una gota lagrimosa que tu nuca roció para resbalar por tu columna en descenso lento hacía tus nalgas
Texto agregado el 23-08-2004, y leído por 553 visitantes. (7 votos)