Aferrados al suelo los pies de piedra escapa mi cabeza por encima de las nubes en busca de tu luz ardiente como el jalde deseando nuestras lenguas bailar un tango. Danzas en mi boca ¡ay, gata loca! se cierran las puertas rojas bienvenida a mi alcoba...
Texto agregado el 23-08-2004, y leído por 140 visitantes. (0 votos)