EL PRIMER DÍA EN MI NEGOCIO

A veces las cosas suceden cuando menos te lo esperas, muchas veces pueden ser pequeñas sorpresas que te llenan de alegría y otras pueden ser grandes decepciones que te agarran en forma inadvertida para derrumbar tu mundo.
Les contaré mi historia; mi nombre es Thomas Watson, apellido que algunos de mis amigos han usado en broma puesto que soy detective y muchos lo relacionan por el fiel amigo de Sherlock Holmes. Aunque curiosamente jamás he leído algún libro de él ni he visto su película. Como sea solo es ciencia ficción no creo que me sirva para mi desempeño académico ni tengo interés en saber sobre él.
Bueno, mi historia empieza en Madrid, España, yo nací en Las Vegas, viví mi infancia en Italia, mi juventud en México y posteriormente me vine a estudiar a España, sin mencionar que estuve como alumno de intercambio en Liverpool, Inglaterra, luego les contaré la razón de todos estos cambios de domicilio.
El punto es que en Madrid puse mi oficina, como detective privado, ¿Que genial no? el primer día, no hay nada más emocionante que el primer día de trabajo, sentarte en tu escritorio frente a la puerta de tu pequeño local y ver que tipo de casos interesantes se presentan en tu puerta, así que me hice un café, tomé el periódico y me puse a esperar en mi escritorio.
Bueno, se hicieron las 11 A.M. y yo sin desayunar, pero bueno, siendo mi propio jefe ¿Porque no tomarme tiempo para ir a comprar algo de desayunar y traérmelo a la oficina? dejaré un recado en la puerta.
Fui al restaurante que se encontraba enfrente de la oficina
Mariano`s Pizzas, nada mal el lugar tenían comida variada, y abundaban sobre todo en comida italiana, sin mencionar que desde el restaurante podía ver si alguien llegaba a mi oficina. De igual forma pedí el desayuno para llevármelo en la oficina, y mientras estaba comiendo empezó a sonar la puerta. En eso le di la indicación a la persona que estaba detrás de ella que pasara, sin embargo; nadie entró, así que lo volví a repetir.
¡Pase por favor!, y solo volví a escucha que tocaban. En eso salí a abrir la puerta: Era una mujer Rubia de ojos verdes, uno setenta de altura con un vestido elegante, la cual cargaba un fino bolso Platinum de Ginza Tanaka, y ropa que sobrepasaba por mucho el precio de su bolso, acababa de bajar de un lamborghini Murciélago modelo 2014, algo ostentoso si nos ponemos a pensar que en ese tiempo era Noviembre del 2013.
En eso la mujer rubia de ojos azules se acercó a mi me dio un beso y me dijo: ¿hijo mio que tal te esta yendo en tu negocio? tu padre y yo estamos tan emocionados de que nuestro hijo pequeño esté cumpliendo su sueño amado de ser detective.
Yo - ¡Claro que no madre!, mi padre jamás me perdonará que no halla querido ser empresario como él y mis hermanos mayores.
Madre - Pero hijo, entiende no es que no queramos que seas detective, solo es que tu padre se impresionó al ver que de los 5 hijos eras el único que no quería meterse en la empresa. Y acá entre nosotros - Se acerca la madre susurrándole en el oído - A tu padre no le queda mucho de vida tanto él como yo ya estamos viejos, yo en una semana cumplo los 70, y tu padre casi se queda dormido en el camino. Él ya no es la persona de negocios que era antes, ha hecho muy malas inversiones últimamente y aunque no se lo hemos dicho estoy segura de que él ya sabe que su condición médica no es muy buena. Además, de los 5 siempre has sido el preferido de tu padre, eres como él, tienes un gran intelecto y desde su punto de vista eres el indicado para continuar con la compañía y con la mayoría de los negocios, si no es que todos. El hecho de que hallas preferido ser detective lo ha desconcertado solamente, pero sé que solo es la impresión, verás como después entrará en razón y te apoyará como yo.
Yo- Gracias madre aunque lo dudo mucho, el tenía fe en que yo seguiría con los negocios familiares y que eso de ser detective era una idea loca que tenía de niño, pero mis ideales siempre han sido fijos, esto es lo que quiero, y mi padre jamás lo entenderá. Si vino hasta aquí desde Francia de seguro es porque quiere hacerme cambiar de opinión.
Madre- Hay Tom, hijo mío, no seas tan duro con él.
Padre- Beatriz! ¿Terminaste? ¿Ya nos podemos ir? Ya viste como nuestro hijo derrumba su futuro, ¡ahora vámonos!.
Madre- Bueno cariño, me despido por ahora, pero tu padre y yo estaremos unos días en España, nos alojaremos en el Hotel Ritz, le dije que como regalo de cumpleaños quería viajar para acá, pero enserio hijo tu padre entrará en razón dale tiempo. Mañana vendré a visitarte y mi cumpleaños lo festejaremos aquí, tus hermanos accedieron a venir, aunque aún Lucy no me ha respondido las llamadas. Pero estoy segura de que con gusto vendrá desde México a festejarme mis 70 añitos, nunca me ha fallado mi Lucy para ir a París, no creo que lo haga para venir aquí quedando tan cercas.
Yo- Bueno madre pues te agradezco que hallas venido a España solo a visitarme e inclusive hallas organizado tu cumpleaños aquí, sabes que nada me costaba ir a París a tu cumpleaños.
Madre- Hay hijo no es eso, realmente quería venir a Madrid.
Yo- ja ja Madre tu sola te contradices, bueno me dio mucho gusto verte, ve ya con mi padre que no deja de hacer sonar el claxon, le dices de mi parte que no sea enfadoso.
Madre - ¡Thomas! - Responde la madre en forma de reprimenda.
Yo- ja ja solo bromeo ya ve, conoce Madrid por segunda vez y no hagas travesuras.
Madre - ¡Hay hijo!.
En eso se marcharon mis padres, mi madre con una cara de preocupación como de diario y mi padre molesto por lo ya relatado anteriormente.
El resto del día solo estuve en la oficina leyendo, mandando mensajes de texto y en la computadora, no salí mas que para comer pues no quería dejar el negocio sólo aunque no hubo ni un solo cliente. Pero bueno, estaba empezando solo era cuestión de agarrar fama ¿o no?
Como sea, ese fue mi primer día como detective privado, sin ningún caso y con ninguna aparición a mi negocio salvo la visita de mi madre.
Pronto les contaré el resto de la historia. Pero eso es otro capítulo.