Hoy hablamos del pasado, me regalaste tu esencia.
Yo hurgaba en tus fantasías disfrutando del presente;
pero pronto comprendí que existe una diferencia
que no podemos zanjar, porque el futuro está ausente.

Es un gran rompecabezas, acomodar la experiencia,
pues tu verdad y la mía juegan un rol diferente;
y el azar tan caprichoso no sabe de la inocencia
de dos almas que se entregan dejando a un lado la mente.

Te confieso mis temores, tengo miedo de quererte,
y que tantas ilusiones se derrumben poco a poco,
mientras se empieza a apagar la risa por un prejuicio.

Me pregunto si esta vez, alguno será tan fuerte,
para hablarle a un corazón, que tal vez está muy loco
y aunque lo quiera negar, amar es su único vicio.