y se terminó. Nos miramos sin los tapujos Del amor -Remedio del dolor de almas- Nos vimos la herida sin vendas. La mesa con los cafés Ya no es el ring de batallas Interminables de te quieros O te amos mudos Ya no le quitamos las entrañas Al tiempo. Ese nombre de leyenda A caducado con la mujer Que ahora me mira, Me habla Me siente Y nada Nada. ¿Será que fundirme la mente Pensándola en enteras noches, Me fundió? ¿O crujir el alma En la noche silente Me dejo en cristales? Busque en tus besos Alguna gota del brebaje del ayer -nuestro ayer- Y solo sentí cristales. Se terminó me dijo, Y le creí. Nos miramos con la bronca Del esfuerzo inútil Y el adiós impensado Nos separó del camino. El Mesiaz
Texto agregado el 23-01-2014, y leído por 248 visitantes. (7 votos)