Fuiste un ingrato porque no hubo día
que no cuidara tu salud y aspecto
Supe darte el sustento que debía
y procuré disimular defectos
Supe perdonarte los excesos
y celebré tu esfuerzo y tu fervor,
te enseñé los gestos y los tonos
y aprendiste a mirar al corazón.
Y hoy, a pesar de lo que he hecho
hiciste de mi cara un bandoneón
mis manos las manchaste de violeta
le diste a mis palabras nueva voz
las aguas de mis ojos están secas
y a veces digo, muy a mi pesar
alguna tontería sin razón.
Confiaba en ti, en vano me defiendo
de un nuevo Brutus en vena de traición
Texto agregado el 17-01-2014, y leído por 469
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...cuando planté rosales coseché siempre rosas...Cierto, a mis lozanías va a seguir el invierno. ¡Mas tú no me dijiste que mayo fuese eterno!
(El gran Amado Nervo). Lindísimo tu poema. Abrazos Clorinda
Yo pienso que aunque el cuerpo se deteriore debemos quererlo,ha sido nuestro carruaje,por años.Unas más otras menos;pero hay que amarlo*****
Victoria 6236013
03-03-2014
Ay por este cuerpo Bruto traidor.... el cuerpo del delito. ..
:) sabiel