Voy caminando hacía ti,
mis pies descalzos disfrutan de la arena fresca y húmeda,
mi cabello al viento;
y tus brazos abiertos esperando los míos.
Me miras, con tus ojos de miel...
y tu sonrisa;... lo dice todo...
Me rodean tus brazos y muy despacio al oído,
¡Susurras!
Te amo