Bendita concepción aquella que en sus crisoles ardientes
forjó a estos aguerridos héroes para que un día señalado
transformaran sus manos en poderosas espadas de modo que
toda saeta que llegase a sus dominios fuese investida por el viento
para ser devuelta por los voluntariosos resortes de sus espíritus
y orillando la peligrosa línea que separa la gloria del fracaso
fuese a estrellarse en la arcillosa avenida de la victoria
y en el duro concreto de los desafíos y adversidades.
Oro eterno engalana sus augustos corazones para declarar
la primacía de estos seres prodigiosos que encandilan al pueblo
con sus reveses que son símbolo de triunfo y sus remaches
que derriban al enemigo al cual solo una red separa,
proyectiles alados que se clavan en el corazón rival, señalando
el sometimiento de los que se prosternan respetuosos
ante estos dioses blancos forjados en el Olimpo…
Texto agregado el 21-08-2004, y leído por 522
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Lectores Opinan
22-08-2004
ingenioso¡¡¡ BUENO. besos querido GUI y mis estrellas monilili