Tal beso que me has dado
no es más que una traición,
al igual que tantos otros,
me odias mucho hasta el querer irme
de la casa desesperado,
es el desamor que reina.

Ahora los fuertes besos de ternura
se convierten en olvido,
olor a odio y desprecio.

Mi alma esta triste
en tan solo pensar la decepción,
ignorando mis pensamientos,
el pensamiento ignorado.

Lloran gotas de sangre mis dolores
al besar mis labios,
beso traicionero,
lo cual me sabe a amargura
el desenfreno en mi interior.

Lucha, lucha así
para mantenerme en prisión,
prisión sin juicio,
las noches más oscuras de la vida
no son más que puro fanatismo de rencor.