FORTUNA
Una noche desperté y encima de la mesa unas grandes ratas, negras y de rabos largos y pelones, comían las sobras de la comida desa noche , Carlota no acostumbraba a recoger los platos sucios, y con residuos de comida, de la desvestida y desbalanceada mesa que, apenas me quedaba a dos metros del hundido ,tieso y sucio camastro donde dormía. ¡ Mal dormía ! pues las bolas duras del relleno de guata de la vieja colchoneta, que a tantos años se había comprimido formando valles y lomas, nunca me dejaba descansar como Dios manda.....
Si, Carlota no era muy aseada , yo no se como mi padre podía tener relaciones con aquella desaliñada y sucia mujer ¡ Aguanton que fue mi padre!
Mi medio hermano no salia de una enfermedad para entrar en otra, al final resulto ser que la leche de los pechos de Carlota era la que lo enfermaba. Aquel medio hermano mio tenia problemas, se mantenía sentadito, en su maloliente y desvencijada camita, balanceado su flaco torso hacia atrás y hacia delante, con la triste mirada de sus ojitos en un punto fijo, distante; perdido, con aquellas dos lineas de mocos, que siempre salían de su pequeña y afilada naricita, que se secaban y volvían a aparecer sin que Carlota se preocupara por limpiar.
Yo..si, deje la escuela recién cumplidos los siete años, casi justo a la muerte de mi padre, Carlota me enseño a vender agua en el cementerio y a robar las flores de las tumbas para, después, ella venderlas a los dolientes que visitaban a sus parientes. Así fue como me relacione con el negocio del camposanto , limpiando tumbas, robando lapidas, cruces, floreros, dirigiendo entre ellas a los parientes que no encontraban donde habían enterrados a sus queridos muertitos, muchos de ellos venían, quizá, por el cargo de conciencia por no haberlos recordado por ya mucho tiempo. Carlota me enseño porque ella dijo que no podía mantener a mi enfermo hermanito y a mi .
El trabajo en el cementerio me dejaba una cuantas monedas que daba a mi madrastra, mas, ella le limpiaba y lavaba la ropa al señor Eustaquio y también le servia en otras sucias cuestiones, y que mi Diosito me perdone por lo que le estoy contando de aquella flaca y sucia mujer . Le decía que Carlota, de sus trabajos ganaba sus buenas monedas las que ajuntaba con las mías, y que yo le daba, pero en la casa solo se comía alguna vianda sancochada con un poco de sal, un café aguado y algún que otro trozo de un viejo pan que alguien le regalaba por caridad.. La vieja ropa que me ponía era recogida de limosna cuando ella, con mi enfermizo hermanito en sus brazos, tocaba las puertas pidiendo, por compasión Cristiana. Ansi me ponía los vestidos regalados sin importar la medida, los rotos o el color. ¡ Que mi Dios me perdone desto que le cuento ! Algo de la maldad y malas costumbres della se me tenia que ajuntar y aprendí a ocultarle algunas monedillas de las que ganaba con mi trabajo y con ellas me compraba algún pedazo de mortadella o de salchichón . Ansi fue mi niñez, ansi mi juventud y mucha parte de mi, ya hombre.
Si, siempre he trabajado en este cementerio. Bueno, de los siete a los cincuenta y tres son....
– ¡ Cuarenta y seis !
– Mucho tiempo, lo se. Pero me ha ido bien, empece acarreando agua y hoy soy el jefe de los sepultureros. Me case cuando yo tenia treinta y seis años y aunque no tenemos hijos, porque Diosito no le dio el privilegio della de parir, vivimos felices..¿ Carlota? Ella murió de una extraña enfermedad, dicen que fue contagiada por uno de esos hombres con los que se acostaba; fisiles, ficile, sifiles o algo ansi, es como un bicho que entra y pudre la sangre y a pesar del alcohol que corría por sus venas, y que dicen que lo desinfecta todo, esa cosa la mato. ¡No !, a ella la quemaron, ni velorio tubo; la quemaron en el mismo hospital del municipio.
¿ Mi hermanastro ? Cosas de la vida, El se fue pa la suida , se fue con un señor mayor, disque su protector, pero quien lo ha visto disque vive como mujer y que tiene hasta automóvil y casa grande con un gran jardín. Yo no he sabido mas, ¡ y eso que me porte con el como un padre !
¿ Anécdotas dice usted ? en este trabajo no tienen falta ¿ La que mas me impresiono? Puede ser una que tenia relación con mi madre ..
¿ Ella..? no, yo no la conocí, ella me dejo con mi padre cuando yo tenia dos años y se desapareció, dicen que se fue a la capital con otro hombre. Mi padre me contaban que a mi madre le aterrorizaba el pensar que fuera enterrada viva por eso la historia del doctor Lozano es la que mas se me ha grabado.
Arresulta aser que una noche, ya muy tarde llamaron al doctor para que fuera a certificar una defunción. La muertita era una joven llamada Eloisa y según su historia padecía de unos ataques que la dejaban inconsciente y echando espuma por su boca . Al doctorcito le gustaba empinar el codo y aquella noche se había pasado por su gaznate alguna que otra copa de mas y, apenitas reconoció el cuerpo y, como Eloisa no se movía y el doctorcito sabia del mal que padecía la muchacha ¡ Pum..! que firma el certificado por muerte natural. ¡Mire..! se me pone la carne de gallina. En el velorio, que la muertita se mueve y habré sus ojos, pero solo la vio una vieja que se había acercado a la caja y medio desmallada y a gritos alerto a los presentes. Llamaron de nuevo al doctor y este ,aun mas borracho, y al ver que la joven no se movía y viendo que nadie mas atestiguaba la supuesta resurrección, certifico su certificado. Cumplidos cinco años de la muerte de Eloisa y al exhumar el cadáver horrorizados vimos que se había dado vuelta, y la tapa, de la caja de madera, estaba marcada con surcos producidos por las uñas de la dijunta donde se encontraron astillas.. El doctorcito cuando se entero se volvió como loco y vagabundeaba por las calles sucio y borracho y dicen los que le vieron que solo repetía Yo la mate...Yo la mate..
Dos meses después se ahorco.
¿ Mi mujer ? Se llama Carmela y mejor no pudo mi Diosito darme una . ¡ No, no es bonita! , mi Diosito no le dio ese regalo y a pesar de que sus ojos no están bien alineados y, desa prieta verruga, como flor marchita, que adorna la comisura derecha de su grande boca y de, aquella, su estrecha y pequeña frente, siempre tubo un cuerpo que se lo envidiaban en el pueblo casi todas las mujeres. Trabajadora como no hay nadie y muy limpia . Es muy apreciada y casi siempre le están regalando la ropa usada de la familia donde trabaja y en ocasiones hasta dineritos extra. Gracias a la influencia del señor Garcia...
Si, Garcia , es uno de los señores a los que mi mujer limpia la casa y lava su ropa . Como le contaba, el señor Garcia nos resolvió el terrenito adonde contruyimos nuestra casita. Gracias , también, al señor Lorenzo que fue el que nos facilito la madera...
¿ Como..? Si, ella también trabaja en la casa del Señor Lorenzo.. ¿ Por que lo pregunta ansi en ese tonito..? ¿ No sera usted como esos disque son mis amigos y comentan eso, de que mi mujer recibe muchos regalitos..? ¡ No mi viejo, no ! Tanto dieron esos pendejos quenfrente a Carmela y le obligue a jurarme ante ese mi Diosito , que me ha dado tanto, quella no me engañaba. Se ofendió como yo nunca la había visto y casi estuve al punto de perderla y me gritaba que, como yo, yo dudaba de su honrades. Estuvo sin hablarme casi como un mes, en ese tiempo yo me sentí el hombre mas desgraciado de este miserable mundo y a mucho rogarle que me perdonara, ella, entonces , me obligo a prometerle, ante mi Diosito, que nunca mas dudaría della...
¡ Claro que cumplí ! ¿ Cuando, entonces, hemos estado mejor..? ¿ Por que cree usted que soy el jefe de los sepultureros..? ¡ Gracias a Carmela ! Ella se lo pidió al jefe del ayuntamiento municipal...
¿ Que por que ? Porque ella es la única que le lava y plancha sus camisas como ninguna criada antes pudo hacerlo .
No ,amigo esta felicidad, esta buena fortuna miá, ningun pendejo podrá acabarla con chismecitos, yo a Carmela la tengo en un altar y soy feliz.
Usted hace cada pregunta..¡ Seguro que bebo..! ¿Quien no va a tomar cuando tiene a diario que recibir a la Señora...
¿ Que cual señora..? ¡ Hombre, la señora muerte..!
¡ No ! Miedo no le tengo, pues cuando todo el mundo la describe como una vieja flaca, fea y huesuda ,traicionera,cruel ,inclemente y despiadada yo la miro como a una dulce y piadosa viejita vestida de negro..
¡ Si! Dulce y piadosa, quizá mas que la señora vida.. con todo lo bella y atractiva que es .. Por
que ¿ Donde esta lo dulce y piadoso della ? ¿ No es ella la que nos deja expuestos a todas las enfermedades cuando ya salimos de nuestra primera juventud.? ¿ No es ella la que cuando mas le amamos nos abandona por los mas jóvenes ? En cambio, cuando la vida nos abandona, nos deja, nos desprecia , la señora de negro nos recoje en su seno y nos hace descansar y ahí, según el cura de la pequeña ermita de aquí del cementerio, vamos a donde Diosito que nos espera para que volvamos a vivir en el cielo donde ya nada es pesar, donde no hay odios, ni guerras donde todo es descanso y paz... lo malo es que el padrecito de la ermita no ha estado en ese lugar y mis muertitos, ¡ Ninguno! , ninguno ha venido a contarme de como le va en ese mas alla que dicen que están...
¡ Si, yo los he oído..! En las noches oscuras he sentido como se mueven dentro de estas tumbas,
he oído risas,,llantos, gritos, quejas, gemidos y lamentos, pero ninguno me ha venido acontar.
A veces pienso que los que están aquí no son los muertos, pienso que los muertos son los que viven sin alma, sin amor, sin esperanza, con odios,con envidias,con rencor . ¡ Si ! Esos que sueñan con el paraíso cuando tienen el regalo de esta vida , aquellos que están lejos cuando tienen que vivir su aquí.
Yo bebo porque soy de esos que se escapan del presente por cosas del pasado . Yo bebo, ya por costumbre .
¿ Mañana..? si, aquí estaré si no, ¿ Quien cuidara a mis muertitos...?
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