PARÁLISIS Destornillaste los sentidos. Dates vueltas hasta agotar lo cuerdo que te quedas. Ahora, tocaste si quiere lo sensible. La zoología engulle la parte animal de tú anatomía; pero jodiste tanto que malograste su ego. Una alcachofa puso su ojo en el ombligo, asqueado vomitaste la bilis. La patria se atemoriza al realizar auditoría a la reserva de sus hombres. Inyectaste una alta dosis preventiva contra el hambre y aguanta hasta que pase la crisis. Permíteme tus senos magnolia para deleite de mis manos. El deseo se me metió por los ojos llenándome el cuerpo de fiebre y la boca de baba. JOSE NICANOR DE LA ROSA.
Texto agregado el 12-12-2013, y leído por 299 visitantes. (1 voto)