DICIEMBRE DE 1633

Hoy primero de diciembre, habiendo su excelencia el señor virrey ordenado una junta del real acuerdo general de hacienda, se determino que por este año no se despache el navío a las provincias de nueva España, por haberlo así pedido los comerciantes de la ciudad con gran insistencia.

Día 2, se hizo en esta santa iglesia metropolitana las honras del cavo de año al doctor Juan de la Roca, quien fue arcediano de la mencionada iglesia y predico el padre maestro fray Juan de Rivera, de la sagrada orden de san Agustín.

Día 3, el doctor Álvaro de Torres quien es alguacil mayor de la ciudad, vuelve a servir en el mismo oficio después de muchos meses que estuvo con licencia y viajo al pueblo de Pisco.

Día 4, ingreso a esta corte el licenciado don Diego de Aguilar y Herrera, quien es abogado de esta real audiencia y juez de comisión de la cusa de capítulos contra el maestre de campo Pedro Laínez, quien es corregidor de Saña en cuyo favor pronuncio una sentencia favorable y honrosa, por haber averiguado la verdad y la malicia del capitulante.

Día 5, por orden del señor virrey se despacho gran cantidad de gente a caballo, a cargo del alférez de la santa hermandad don Cristóbal López, para ir a reprimir y castigar los continuos excesos y robos que diferentes bandas de negros cimarrones hacen en los alrededores de Cieneguilla.

Día 6, su excelencia el señor virrey se encuentra presente en la real sala del crimen de esta real audiencia, a la vista del caso seguido por Juan Roldan Dávila, quien es alguacil mayor de la ciudad de Trujillo, quien esta preso en esta real cárcel de corte, en el proceso que contra el sigue el canónigo Andrés Gerónimo de Silva, habiéndose escuchado los alegatos que con energía esgrimieron los abogados de ambas partes, los 4 jueces nombrados no determinaron nada al respecto y salió en discordia.
Este mismo día por la tarde al llegar la noticia a oídos del señor virrey, sobre la discordia y disensiones que hay entre los religiosos de la sagrada orden de la merced, para la elección de su nuevo provincial que se realizara mañana, decidió ir en persona y acompañado de algunos de los señores de la real audiencia a dicho convento, donde hizo una platica que sobre este caso pedía y les pidió llevar su elección en forma pacifica.

Día 7, esta mañana los religiosos de la orden de la merced, eligieron como su provincial al padre presentador fray Alonso de Espinoza, con el general aplauso de esta corte.
Este día se enterró en esta santa iglesia metropolitana el licenciado Diego Gonzales de Chamorro, quien era racionero de ella.

Día 8, el señor virrey y los señores de la real audiencia, esta mañana asistieron a la misa y sermón solemne que se canto en la iglesia de los padres mercenarios, en hacimiento de gracias de la elección de nuevo provincial.

Día 9, el señor virrey y los señores de la real audiencia, asistieron a la fiesta de la limpia concepción de nuestra señora, que se celebro en el convento de monjas de su advocación.

Día 10, en el barrio de santa Ana, como a eso de las 10 de la noche ingresaron unos ladrones a una casa y hallando la mesa puesta se llevaron toda la vajilla de plata.

Día 12, el señor virrey ordeno una junta del acuerdo general y antes que diese principio, ordeno leer una real cedula de su majestad el Rey, que pide un nuevo donativo y se mando guardar y cumplir.

Día 13, como a la una y media del día su excelencia el señor virrey, fue al puerto del Callao a ver el avance del carenado de los bajeles de la armada real.

Día 14, el padre comisario del beato Juan de Dios, fue a quejarse al señor virrey de que un gran numero de religiosos, la tarde anterior desvergonzadamente le negaron obediencia, no contentos lo maltrataron poniéndole las manos, su excelencia el señor virrey envió al doctor Dionisio Pérez Manrique quien es alcalde del crimen, para que averiguase y castigar este alboroto.
Este mismo día el señor virrey hizo merced del corregimiento de Huanta, a don Pedro de Mendoza un caballero criollo de esta ciudad.

Día 15, el señor virrey hizo merced del corregimiento de Andahuaylas al capitán Antonio de Toro, quien estuvo sirviendo en Chile, en consideración de su casamiento con la hija del contador Damián Bravo, quien es juez oficial de la real caja de Castrovirreyna.
Hoy también el señor virrey hizo merced a un hijo del difunto licenciado Gregorio Arce de Sevilla, para que oficie como relator de esta real audiencia, quien tenia en propiedad su padre y a otro de los hijos el corregimiento de Vítor.

Día 16, después de haberse visto en discordia el articulo sobre la libertad pedida por parte de Juan Roldan Dávila, alguacil mayor de la ciudad de Trujillo, volvieron a votar en el real acuerdo y se le denegó lo que pedía.
Este día por la tarde el señor virrey, asistió a unas conclusiones de teología en la compañía de Jesús, que presidio el padre Hernando de León.

Día 17, el señor virrey esta madrugada, fue a ver el estado del carenado de las naves de la real armada, estuvo de vuelta en la ciudad como a la una y media del día.
Este mismo día el señor visitador y obispo de Arequipa, hizo órdenes en la iglesia del convento de monjas de santa Catalina.
Hoy también en la sala del juzgado de esta corte se trabaron en palabras muy pesadas, el almirante don Andrés de las Infantas y don Jácome de Quezada, por cuya causa el prior y los cónsules los mandaron prender y luego informaron al señor virrey de este caso.

Día 18, fiesta de la expectación de nuestra señora, se celebro su día en la insigne congregación de seglares del colegio de la compañía de Jesús, se hallaban presentes el señor virrey y los señores de la real audiencia a la misa y sermón.

Día 19, por mandato del provincial de la santa hermandad, llevaron a la cárcel de corte al alférez y otros ministros de dicha hermandad, por incumplir la orden dada por el señor virrey y mentir, ya que fueron en busca de los negros cimarrones que infestan la comarca de Cieneguilla y habiendo dado con ellos, les quitaron una gran cantidad de fardos robados y los dejaron libres, después volvieron a la ciudad diciendo que no los habían podido hallar.

Día 20, por cartas llegadas por correo ordinario desde Potosí, avisan que a muerto en dicha villa don Juan Martel de un arcabuzazo, habiéndose detenido a su matador este había dado como descargo, que lo había hecho en defensa de su honor por cuanto había probado el adulterio con su mujer.

Día 21, se celebro en la iglesia de nuestra señora del Prado, la fiesta principal de su advocación y predico el padre Juan Basilio quien pertenece a la compañía de Jesús, asistió el señor virrey y la real audiencia.

Día 22, don Rodrigo de Esquivel, vecino feudatario de la ciudad del Cuzco, obtuvo una sentencia favorable en un pleito muy cuantioso de hacienda que sigue en la real audiencia.

Día 24, fiesta de pascua de natividad y las monjas cantaron sus calendas con excelente música.
Este día el señor virrey y los señores de la real audiencia hicieron por la mañana y por la tarde, visita general a las cárceles de la corte y de la ciudad.
Y como a las 8 de la noche el señor virrey ordeno una junta de algunos abogados de esta corte, para comunicar el articulo y competencia de jurisdicción que pasa entre el tribunal del consulado y la real sala del crimen, sobre la prisión del almirante don Andrés de las Infantas, caballero de la orden de Santiago, pero no se llego a ningún acuerdo y termino en discordia.

Día 25, fiesta de pascua de navidad, un mancebo Vizcaíno que es oficial del correo mayor de esta corte, le dio con una navaja afilada tres cuchilladas a una negra criolla, que es esclava de dicho correo mayor y dicen que es por celos de un mulato, fue el cobarde corriendo a refugiarse en el convento de san Francisco.

Día 26, el señor virrey por la tarde fue a pagar la visita de buenas pascuas al señor arzobispo de la ciudad, al obispo de Arequipa y visitador de esta real audiencia.

Día 27, fiesta del glorioso apóstol y evangelista san Juan, advocación de la santa iglesia metropolitana de esta ciudad, celebro su día con la asistencia a la misa y sermón del señor virrey y la real audiencia.
Por la tarde el señor virrey fue a devolver la visita al señor obispo electo de Huamanga fray Gabriel de Zarate.
Este día también llegaron algunas nuevas de tierra firme, pero se dice que no tienen fundamento y fue traída por un pasajero que vino en el navío de don Miguel de Urrutia, que había tocado fondo en el puerto de Paita.

Día 28, se coloco la imagen milagrosa de nuestra señora de Copacabana en su nueva iglesia, que esta situada en el barrio de san Lázaro y asistió por la mañana el señor arzobispo, y por la tarde asistió el señor virrey a la procesión.
Este mismo día el señor virrey hizo merced a don Joseph Hurtado de Salcedo y Mendoza del corregimiento de Vilcas, agregándole al que ya tenía en Castrovirreyna.

Día 29, avisan desde el puerto del Callao que había crecido el mar la noche anterior, de manera que había obligado a hacer plegarias y rogativas en todas las iglesias, dicen que han quedado anegadas las escuelas del colegio de la compañía de Jesús, además de algunas bodegas y casas que están contiguas al mar.

Día 30, por mandato del corregidor de los naturales de esta ciudad, se ahorco a un indio por haber dado muerte a otro de su raza.