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¿Dónde estoy? ¿Qué ha pasado?, no veo nada a mí alrededor, Solo oscuridad, ¿Por qué lloro? ¿Por qué siento que estoy cayendo de hace tiempo?, ¿por qué siento que ya no voy a poder salir de aquí?, ¿por qué me siento inmóvil?
La verdad no tengo miedo, es algo extraño para mí y nunca antes me había ocurrido, pero, aún así no me da miedo ni siento curiosidad por saberlo, siento como si todo lo malo hubiese terminado, pero a la vez es el comienzo. ¿Comienzo? ¿De qué? .Siento que soy una especie de muñeco cayendo a lo lejos, viendo algunas ventanas de luz en este agujero oscuro, donde veo a mi madre, padre, amigos, hermanos, familiares. Riéndose de mí, la verdad no estoy triste ni siento rencor. Trato de alcanzar algunas de esas ventanas, pero cuando me dan la mano, riéndose me sueltan, y vuelvo a caer. Veo a mi madre, ella sabiendo que me puede sacar de ese agujero, me suelta y me ignora. Y mirándola a la cara veo como se aleja mientras caigo.
Aún así no tengo miedo, siento como si me quitara un peso de encima, pero sigo sintiéndome un muñeco inmóvil y quieto cayendo viendo como los días pasan, me pregunto si podré salir de aquí.
Caer ya era rutina, pero un día, una ventana se abre y dos manos gigantes me agarran. No sé, me sentí bien y en tranquilidad sentí como si todo lo que he pasado no importase, ni si quiera me importaba estar en un lugar todo oscuro, sabía que esas manos estaban ahí y se iban a quedar ahí, cuidándome, protegiéndome. Era como la protección que mis familiares nunca me dieron.
A lo lejos de esas manos sentía una voz, una voz linda y tierna diciéndome “Te Quiero más que a nadie y para siempre”. Fue donde el agujero se aclaró, y mágicamente vi como todo se iluminaba, era un mundo donde solo estaba Yo y esa persona, era todo perfecto, Pero. Todo tarde o temprano tiene que terminar ¿no? Ese día estaba abrazado a sus manos gigantes. Cuando de repente la ventana se empieza a cerrar, yo me doy cuenta y me aferro más, pero las manos dan un pequeño sacudón y salgo volando, y vi que mientras se cerraba esa venta la persona ideal para mí se iba con la persona ideal pera ella tomados de la mano, y ¿qué creen? Volví a caer.
Pero esta vez no fue como la primera vez, esta vez sí tenía miedo también tenía curiosidad de que iba a pasar conmigo, en ese momento fue cuando realmente sentí como mi corazón se quebró en mil pedacitos y ya nada tenía sentido ni los días, ni las tardes, ni las ventanas que se me habrían, tenía miedo de encontrar otra vez a una persona como la que me dijo te quiero y burlándose de mi me soltó al vacio a la misma nada, sabiendo que todo de mi estaba en sus manos.
Desde ese momento vague por un vacio de oscuridad sin importar nada.
Fue ahí cuando entendí que cuando se pierde a alguien que amas, es mucho más doloroso que una muerte de un ser querido, ya que la muerte de tu ser querido, la despedida es definitiva, el dolor pasa al tiempo, pero cuando terminas o terminan una relación, más si fue intensa, el dolor es duradero, porque cada vez que veas esa persona se reavivaran las esperanzas y tener que lidiar con la idea de que todo termino y no volverá a ocurrir de nuevo, eso, ¡eso es horrible! . Es como estar muerto en vida, es como si todos los días se te muriera un ser querido cada vez que ves a esa persona.

Belén

Texto agregado el 20-11-2013, y leído por 232 visitantes. (1 voto)


Lectores Opinan
20-11-2013 Me gustó mucho la forma de narrar tu cuento! Y sí que es muy triste perder al ser amado, es un dolor intenso. Pero recuerda que siempre habrá una esperanza también de sanar tu pena. Saludos 5* Romie
 
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