Adriano es un individuo que desde niño quiso huirle a la muerte, para eso siguió todos los consejos que le dieron sus padres. Asistió a la escuela y se graduó con las más altas calificaciones; posteriormente ingresó a una prestigiosa universidad y nuevamente fue un alumno destacado. Su objetivo siempre fue ocultarse de la parca, en realidad no tenía otra motivación para estudiar. Cuando obtuvo su título universitario, decidió que debía continuar estudiando por lo que realizó un posgrado en la más alta categoría, recibió un diploma de doctor. Lamentablemente, no pudo realizar una investigación post – doctoral, realmente sí deseaba realizar ese proceso, pero desafortunadamente sus padres fallecieron casi que simultáneamente y tuvo que ponerse a trabajar.
A pesar de que Adriano decía que no apoyaba a la muerte en ninguna de sus presentaciones, en el trabajo conoció unos amigos con los que fue a un bar; en ese lugar conoció a una mujer con la que logró entablar una relación de amistad muy fuerte; Adriano no estaba seguro de propiciar un noviazgo, pues siempre ha tenido dudas sobre la bondad del amor, sin embargo, su instinto animal pudo más y finalmente se ennoviaron. Luego de seis meses de llevar el rol de novios, decidieron que querían dar el siguiente paso, con lo que se casaron por lo civil. Adriano tuvo ocho hijos, es decir, trajo ocho muertos a éste mundo, con lo que entró en una contradicción personal; supuestamente no estaba de acuerdo con los designios mortales, no obstante, se hizo cómplice de la que nos va el deceso.
Luchó por sacar adelante a sus hijos, les dio una buena educación a todos y fue un buen esposo. Ha sido lo que comúnmente se puede un “hombre bueno”, y cree que eso le va a traer una buena recompensa, es decir, considera que por no haberle hecho mal a nadie, no va a tener un fallecimiento doloroso. Los años han pasado, ha entrado en una vejez complicada, poco a poco, su piel se arruga, dejando ver que la muerte se ha acercado hasta su piel; sabe que está acorralado, pero no quiere aceptar el insoportable designio biológico.
La muerte se le ha aparecido y ha conversado un rato con él.
Muerte: Ya estás arrugado, ¿quieres morir?
Adriano: No, voy a luchar hasta el último día.
(1 año después).
Muerte: Estás arrugado y ya no puedes caminar, ¿me aceptas?
Adriano: Lo seguiré intentando.
(6 meses después)
Muerte: Estás arrugado, ya no puedes caminar y has quedado ciego, ¿me dejas llevarte?
Adriano: No estoy dispuesto a desaparecer de los vivos.
(4 meses después)
Muerte: Estás arrugado, ya no puedes caminar, has quedado ciego y tienes un tumor cerebral que te produce dolor cada minuto. ¿Nos vamos?
Adriano: (Con voz quejumbrosa). Tengo un anhelo de continuar viviendo.
(2 meses después)
Muerte: Estás arrugado, ya no puedes caminar, has quedado ciego, tienes un tumor cerebral que te produce dolor cada minuto, y ahora el médico dijo que debían cortarte los brazos y las piernas, pues tienes leucemia. ¿Estás listo para unirte a mi reino?
Adriano: La vida es…. más o menos hermosa.
(1 mes después)
Muerte: Estás arrugado, ya no puedes caminar, has quedado ciego, tienes un tumor cerebral que te produce dolor cada minuto, el médico te ha cortado los brazos y las piernas, además estás sordo. ¿Estás de acuerdo conmigo?
Adriano: Ya no sé qué pensar.
Como Adriano no quiso morir, la muerte se lo llevó después de haberlo degradado al máximo nivel.
|