Volvemos a vernos
detrás de la cascada parada.
Alerta los cantos rodados,
mientras volvemos a vernos
entre murallas azules
imaginadas sin pensar.
Entre juncos doblados
por la fuerza del temporal
y chopos que ya no cantan,
volvemos a vernos.
hay un carruaje sin luz,
y sin caballos pintos,
y un coro de acacias
con voces roncas,
donde volvemos a vernos.
Texto agregado el 07-11-2013, y leído por 111
visitantes. (4 votos)