Caminaba apurado, estresado
Lleno de impaciencia y de rabia contenida
Por tantas cosas que nos pasan:
Proyectos estancados, sueños frustrados
Como camina tanta gente
Por estos caminos del Señor.
De pronto la vi venir,
Una mujer de edad indefinible,
Vestida muy humildemente
Y ciega, usaba un bastón para orientarse
Pobrecita-pensé-ella está peor que yo.
Cuando paso por mi lado
Iba entonando una canción,
Irradiaba paz y tranquilidad
Su rostro mostraba una hermosa sonrisa,
Entonces comprendí el mensaje.
Texto agregado el 30-10-2013, y leído por 204
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Lectores Opinan
30-10-2013
si al final la vista no lo es todo, hay mucho más allá pero lo mayoría somos incapaces de verlo aún con la vista recién graduada y con gafas nuevas. elisatab