Después de pasar varios días viendo a su esposo tan ansioso así, yendo de la cocina al living y mirando por la ventana a cada rato como queriendo ver a alguien, y ya sabiendo lo despistado que era, se animó a preguntarle qué le estaba pasando por esa cabeza de chorlito. “A mí nada vieja, estoy un poco preocupado por lo que explicaron los muchachos en la mesa del café la semana pasada. Te cuento: Hay ciertas probabilidades que nuestro amigo, el flaco Murfi que hace poco se fue para Norteamérica, ya esté de vuelta al barrio por una ley de mierda que hacen cumplir por allá...” (¿…?)
(Tramo de una comedia de equívocos inspirada en la discutida ley de probabilidades Edward. A Murphy)
Texto agregado el 24-10-2013, y leído por 228
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Lectores Opinan
25-10-2013
Siempre me encuentro con alguna sorpresa cuando te vengo a leer.
UN abrazo. gsap
25-10-2013
La ley de probabilidades de Murfi? Y eso entendiste? jaja, muy bueno!! silvimar-
25-10-2013
BUEN RELATO... fabiandemaza
24-10-2013
Sí, esa méndigas leyes. Interesante relato. Arenyndriel