Aquella mañana todo parecía perfecto...
El sol se asomaba y entibiaba las calles rotas por momentos
El colectivo no había tardado, no había apuro sino una mezcla de querer llegar y no llegar jamás
Unas horas había escuchado su voz, creyendo que era un sueño...Era casi imposible, después de tantos años, después de tantos llantos y de dar la vida por tenerlo...Pero no era un sueño, era el momento que tanto había esperado.
No lo dudó, se levantó, busco el atuendo que más combinaba con su ser y fue a encontrarlo...
Tantos desencuentros habían tenido, tanto había ya sufrido que temía llegar y que no estuviera, como si la vida otra vez le estuviera jugando una trampa, como si el mundo se complotara contra su felicidad...
Pero él, ahí estaba, tan distinto y tan igual a aquéllos tiempos...
Su forma de hablar ya no era la misma, incluso su estado, lo notó mas tranquilo consigo mismo, más paciente, quizás hasta más hombre...
Aquél encuentro en la plaza, no planeado, espontáneo, parecía un momento de cine, ensayado muchas veces, pero aún así no lo fue, todo se dio paso a paso...
Ella era tan simple y tranquila, su paz se sentía a su alrededor...
Él seguía siendo tan bonito como siempre, y a su paso las mujeres caían de amor...
Compartieron un tostado y un jugo de naranja, en una confitería llena de vidrios...tanta gente alrededor que estaba pero no existía en ese momento, porque era único de ellos dos...
No pasó mucho tiempo hasta que se unieron sus cuerpos, nunca en la vida habían tenido sexo de tal manera... El calor los atraía y ella no entendía porque su cuerpo sentía tanto y sin poder evitarlo, le dio todo lo que tenía, le dio todo lo que sentía, nada más sincero, nada más único...
Pensó que desde ese momento, volverían a unirse sus almas, para nunca más separarse... Sintió que era el momento de volver a decirle que lo amaba, pero su voz sólo atinó a un ...te quiero... Es que había pasado tanto tiempo, habían pasado tantas cosas... Ya ninguno de los dos eran lo mismo, ya habían vivido tantas otras cosas...
Tuvo miedo, ya todo estaba hecho, y una vez más volvió a romper su corazón, una vez más él desconfió...
Y ella con su alma rota, no entendía porqué la vida le mentía...
Ese día perfecto, se volvió horriblemente triste... quedó anulada por sus palabras, por su mirada, y jamás, jamás volvió a creer....su vida estaba sentenciada y todo lo que lo había amado fue en vano, todo lo que había soñado no tuvo sentido...
Él solamente tuvo las agallas de juzgarla..y nunca más lo pudo perdonar... y decidió no volver a abrir la herida...nunca, nunca más...