Despierto, sonrío, y observo tras las cortinas que nace el sol y el mar está en calma.
Las gaviotas me despiertan con sus ruidosos juegos y una fresca brisa entra de repente en mi cama.
Me descubro solo ante el horizonte, construyendo un mundo de hojas en blanco.
Hacia el este, el verde frondoso me invita a sosiego, el Sur en cambio me lleva hacia el mar,hacia ti cada ves más cerca.
En breve partiré de nuevo, dejaré casa y recuerdos para un nuevo comienzo. En otro lugar, pasajero. Y cuando allí acabe regresaré sin miedos, desde el azul horizonte, el inmenso oceáno, el verde frondoso y el maravilloso cielo.
Y despertaré para sentirme libre, como ayer lo hice mientras dormía y cabalgaré sobre las olas y conquistaré mi nuevo día.