Don Juan de la Pezuela fue el ilustre conde de Cheste, nació en Lima el 10 de mayo de 1810 siendo su padre virrey de estos reinos; a la edad de 8 años fue enviado a Madrid para educarse en el colegio de san Mateo, bajo la dirección de los maestros Lista y Hermosilla.
Consecuente con el espíritu de la familia ingreso al ejercito en 1830 con el grado de capitán, privilegio que disfrutaban los hijos de los virreyes, fue ascendido a brigadier en 1838 ganando igual que el rango el titulo de conde de Cheste, por la victoria que alcanzo en el pueblo de ese nombre ante una gruesa división Carlista, en la carrera militar disfruto de grandes honores llegando a ser capitán general del ejercito, la mas alta jerarquía en España que equivale a llamarlo mariscal.
Fue un revolucionario en el tiempo que era brigadier de caballería, fue uno de los 3 jefes principales que se levantaron contra la autocracia de Espartero; también era un narrador de correcta y fácil elocuencia y tenia un acento completamente americano, abrigaba por Lima una viva admiración romántica, la recordaba sutilmente idealizada, la gran ciudad colonial ya lejana cuyo cambio nunca se resigno a creer; escribió una obra llamada “Tabaré” el conde Cheste tenia en su vida rasgos geniales y era un caballero de los de antiguo cuño, se batió a duelo con Espronceda.
En 1845 fue elegido miembro de la academia española, donde tuvo lucida actuación por cuyo merito ejerció desde 1875 el honorifico cargo de director vitalicio, el conde de Cheste era un gran amigo de todos los que vivían por estas tierras que eran parte de la colonia, tanto en su vida oficial de academias y círculos, como la que transcurría en su sobria y elegante mansión, tenia para todos y en especial para sus paisanos grandes muestras de sinceridad y simpatía, quienes lo conocieron sentían un gran cariño pues era erguido y complaciente a los 80 años, ya dirigiendo las reuniones de la academia o deslizando con su cálido acento americano, escogidos versos de la vieja escuela romántica a la que guardo fidelidad hasta su muerte.
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