ni con todo lo que me quieres
he podido construir un puente,
que me lleve del vació a la vida
y me aleje de la muerte
ni con lo mucho que me cuidas
me he aferrado a un salva vidas
aun me ahogo en el tormento
de mis propios pensamientos
en la clemencia hacia mi consciencia
que pocas veces es escuchada
tantos años en las sombras
se me hace indiferente
el dolor y las penurias
de esta suerte y de tu suerte
sin embargo hay un tesoro
que obsequia tu mirada
ese ardor y ese canto
que muchas veces ha evitado
que mi cuerpo se convierta en
cuna y reposo de gusanos
y aun así,
con todas mis virtudes y defectos,
(sobre todo defectos)
intento demostrarte
lo mucho que te quiero
te espero mientras veo
que también mi hogar te espera
verte pasar la puerta,
amortiguar dulcemente la vida
refrescarme el alma
la lengua y los dientes
con la suave y digna
brisa de tus labios
Texto agregado el 19-09-2013, y leído por 186
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