Satán sonrió y dijo:
- Querido, es inevitable.
- ¿Inevitable?
- Si. No hay otra opción realizable, de cualquier forma.
Pareció reflexionar.
- Es lo apropiado.
- ¿de veras?
- Sí. No hay más apelación. Así que…
- Vale.
Y de un momento a otro, una luz deslumbro mis ojos y una forma vestida de blanco me dio un golpe en las posaderas.
Texto agregado el 10-09-2013, y leído por 91
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Lectores Opinan
10-09-2013
Definitivamente el infierno está aquí. Carmen-Valdes
10-09-2013
yep... y derechito al infierno.. genial!!... anlin
10-09-2013
Y lo celebraste con un alarido que pocos entendieron que era un grito de victoria. ZEPOL
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