Primavera de candor humedecido
Pradera de mi constelación sideral
Guarda mis horas sobre las hojas de mis nidos
Mis momentos más íntimos
Más siniestros secretos perpetuos

Música de mis arboledas perplejas
Enfrenta el sol quemante de palabras abusivas
Suprime al disfraz de mil colores
Recorre mi espanto inusitado

Bordea mis mares enajenados
Apacígualos con ternura fresca
Ese óleo que propagas en tus noches escampadas
Creadora de la calma más silente
Velo izado al viento
Que trastoca mi mirada
Bosquejando un valle con bosques eternos