Con un sol sobre la cara que pocos han sentido,
No busca al calor sombra, ni de sus rayos ha huido,
Carga troncos al hombro y continua el camino,
Sudor con tierra, paso lento, a la montaña el campesino.
Lejos no es aquí, lejos es donde vive.
Espera la brisa del campo pero sin ella sigue,
Siempre quiere, siempre trata, y así sobrevive,
Aveces con hambre, pero nunca pide.
Hombre de hombres, amor campesino.
Trabaja en silencio, vive sin ruido.
Cultiva respeto sin orgullo dolido,
Macho seguro, carácter sencillo.
Humilde de tiempo, rico de espíritu,
Día tras día el mismo ímpetus.
Ejemplo sagrado, labor divina,
Sonríe de lejos, su fiel campesina.
|