NEGRO JESÚ



Jesú,Jesú,Jesú,la negra grita,
mueve la cadera con frenesí
mientras su cuerpo moreno se agita,
como poseída y fuera de sí.


El negro Jesú ya jadea y suda,
sacude,estira y levanta los brazos
con su danza de gestos casi muda,
sueltos,sin toques,caricias,ni abrazos.


La brisa le acaricia esa pollera,
de colores muy vivos y chillones,
la negra Carmen mueve la cadera,
al compás de aquellos alegres sones.


Colgada la luna de una palmera,
lo contempla divertida y curiosa,
al negro Jesú que goza y se altera,
con su negra caliente y amorosa.



La cumbia se enreda y baila en sus pies,
el ron ya se le subió a la cabeza,
pierde el equilibrio y da otro traspié;
tirado en el suelo gime y aceza.



Dando tumbos se dirige a su choza,
la negra rie sin parar,divertida,
se le pega a su negrito melosa,
y corre con él del brazo cogida.