Mutaran en desgracia los besos que no di palabras que no dije llorando brazos vacíos. Muerte en dosis pequeñas cada mañana a la puerta pintando de humedad las paredes de mi cuarto sombrío El alma cayendo en pedazos el vino temblando mis manos maldita nicotina ahogando la vida contigo.
Texto agregado el 27-08-2013, y leído por 127 visitantes. (2 votos)