El estado deplorable del hombre frente al misterioso y omnipotente Dios como Creador de todas las cosas y la relacion entre ambos.
Dios recibe gloria de si mismo.
La existencia de Dios esta fuera de su voluntad.
Dios es y su voluntad no lo obliga a ser.
Dios no es la vida porque la vida es creada -Pero es el dador de vida- tampoco voluntad porque la voluntad es sujeto de un objeto.
A Dios nadie le ha visto jamas porque no se puede ver lo que no ha sido creado por eso El manifiesta su gloria en la creación.
Lo que define a Dios es su poder absoluto y lo que lo acerca a nosotros es su amor.
Nosotros somos voluntad de Dios. La voluntad de Dios es aprobación para existir. Esta voluntad de Dios nos da poder y nosotros decidimos que hacer con ese poder que tenemos. Tenemos este poder de hacer nuestra voluntad hasta el día en que Dios determine que hacer con nosotros. Terminada la obra también el poder es retirado.
La vida es ajena a nuestra voluntad de existir o no.
La voluntad que sale con poder de nuestra boca no puede revocar nuestra existencia. Este hilo muy fino nos da evidencias que Dios es real y único.
La vida en términos de apoderamiento y posesión no nos pertenece, no esta sujeta a mi voluntad. Sigue en la misma proporción que me fue dada desde el principio. Yo estoy en la vida y por lo tanto pertenezco a una voluntad que no es mía. Es la voluntad de un Creador que yo no conozco y no puedo ver ni tocar pero puedo sentir que todas mis funciones vitales: mi pensamiento, mi disciplina, mi sabiduría me sitúan en la ruta desconocida de un ser superior a toda mi existencia, que por mis propios medios no puedo conocer. No puedo mirar mas allá de lo que veo y aunque crezca en sabiduría se que no puedo develar el secreto mejor guardado de mi Creador: En esa voluntad a la que pertenezco esta la verdad de mi misma. Sin que yo pueda entenderlo se que hay un velo, hay un impedimento profundo que limita mi conocimiento acerca del Creador.
Esto me falta por conocer. Y, yo no puedo hacerlo. no tengo recursos para hacerlo ni los medios ni fui dotada de poderes. Pero siento en mi interior, en lo mas profundo de esta"pertenencia" que "algo esta perdido en mi" y ese "algo que esta perdido en mi" no puedo saber que es, si Aquel que me creo no me lo revela, pero reconozco que no estoy unida a El, porque el velo esta biológicamente establecido por herencia.
La voluntad de Dios somos nosotros. Si no soy no hay voluntad y el poder que hay en mi me fue retirado. La voluntad es el vehiculo que transporta el poder para crear..
Conocemos que hay poder en nosotros porque somos el producto de sus palabras, y aunque no existamos o dejemos de vivir, el poder absoluto permanecerá en esa soberanía absoluta y eterna. El poder es eterno.
Por que hay voluntad?.Porque hay vida, creación. Y la vida no es destino sino Palabra de Dios.
Puedo alcanzar a Dios con mi propio esfuerzo?. No, no puedo. Pero puedo conocer el velo, el obscuro velo que me impide llegar a El.
Nosotros, la vida es el objeto de las palabras de Dios y podemos adorarle o no, porque tenemos el poder para hacerlo y esto es lo mas grande que poseemos, mas que la propia vida la adoración lo es todo.
Nos necesita Dios para existir? Es vital la adoración para Dios? si nosotros somo hechos a su voluntad por que su misma voluntad superior al resultado de sus palabras no puede adorarle? En verdad, Dios no nos necesita pero nos ama. Nosotros somos lo mas concreto de sus palabras y quiere que no regrese-mos vacios.
La Palabra de Dios es poder y nos doto de ese poder que engendra la adoración y la adoración engendra la dependencia y la dependencia la servidumbre. Con este poder podemos adorar a quien nosotros queramos. Inclinarnos ante el dios que consideremos mas acorde a nuestra semejanza porque somos fabricadores de dioses, los hacemos de colores, y nos gusta por esta misma naturaleza sentir o vivir que adoramos. Y por esto vivimos en la llama de un suspiro que un dia Dios apagara. Esta es la realidad
lo demas sale sobrando. Si, nacemos como palomas pero vivimos como serpientes y morimos como un nudo de lios como si viviesemos escondidos bajo las piedras. Eso mismo, el mismo ego tiene el hombre.
Dios no esta obligado a existir por nosotros - nosotros no podemos obligarle a existir- porque la voluntad que hay en sus palabras, o sea nosotros, no podemos revocar ni el mas mínimo de sus mandatos. Dios no tiene deseos. Nosotros deseamos un dios. Pero, El no necesita de un Dios.
Al ser voluntad de Dios y compadecerse de nosotros se esta compadeciendo de si mismo. Todo cuanto hagamos y pensemos es poder de Dios. Por esto, El tiene soberanía sobre nuestra vida.
Dios no tiene deseos porque el deseo es una necesidad que hay que suplir o llenar para estar complacido. La necesidad de comer, de vivir, de ser escuchado, de ser leído, aplaudido es creada por nuestra propia hoja de ruta histórica. Marcamos nuestro territorio y nos hacemos a la mar para descubrir con asombro el poder que hay en nosotros: un vivo deseo por ser alguien, por ser escuchado.
Que conclusiones podemos sacar?:
1.- Cuando Dios habla construye o derriba
2.- Dios conoce nuestros pensamientos que en todo
optamos por la muerte porque nos gusta hacer
las cosas a obscuras.
3.- Al hombre lo conocemos por sus obras
y con esto nos basta.
A Dios no le conocemos por sus obras
queremos verle fisicamente
porque sus obras nos hacen pequenitos.
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