Se mueren las mañanas, como se mueren las hojas en otoño
Se mueren los sueños como se mueren los copos de nieve a finales de marzo
Pero ¿por qué?...
¿Por qué deben morirse la cosas que tanto deben vivir?...
¿Por qué no hay un poco de eternidad en esta materialidad?...
¿Por qué se murió nuestro amor? Que lo mato...
¿Acaso, fueron... tus egos o los míos?
¿O acaso el silencio falto, en medio de tanto bullicio?
Yo se que nunca me olvidaras y que jamás te olvidare a ti.
Es difícil todo esto. Más difícil que masticar aquello,
Que no puede estar en nuestra lengua ni un solo instante.
Te amo y siempre lo sabrás...
¿Te amo y siempre lo sabremos?...
Jamás te olvidare, jamás...
Texto agregado el 15-08-2013, y leído por 96
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