En dos ruedas le diste la cara al destino,
te esperaba en silencio,
en una esquina muerta de frío
y la muerte, te observo desde lejos,
con una mueca triste en su cara,
y le diste digna y larga batalla
a esta prematura muerte hija de puta,
esta muerte que siempre gana

muchos son los que lo saben,
la infancia puede ser
la pesadilla presente en el alma
y es por eso que tu vida
fue un gran y eterno sube y baja
un ida y vuelta,
una flor que se vuela en la tormenta

te bebiste cien kilómetros
a fondo blanco en la noche
y te marchaste con el honor
de morir siendo fiel a tus pasiones
esas grandes pasiones
que apagan el fueguito de nuestras velas

le harás falta a tu familia
le harás falta a ella,
ella que se dormía esperando
que muevas las manos y piernas
le harás falta a sus noches
le harás falta a sus penas
es por eso que siempre tu vida
seguirá fluyendo en sus venas

en dos ruedas le diste la cara al destino,
con tu memoria cargada de un silencioso ruido,
¿ruido y bronca,
alegría, soledad y fastidio?
Ciertamente nadie lo sabe,
pero si que te fuiste deprisa
como un hermoso y violento río

si, en dos ruedas, en una esquina con frío,
te fuiste y de mi parte te llevas
todo mi respeto y cariño