A veces hay que escribir sobre lo mismo,
para olvidar ciertas cosas y seguir el camino
aunque lastime el cansancio,
aunque se duerman los ojos,
aunque todas las mañanas traigan el mismo sabor
escribir sobre los mismos sentimientos,
para aflojar ciertos nudos,
para buscarse a uno mismo,
y no llorarse en silencio
lo que debe llorarse con ruido
buscar la hora, el momento
o no buscar nada, tan solo hacerlo
escupir las palabras,
darle el pecho a la calma
y así ensuciar la libreta,
la pluma, o el ordenador
engañar al aburrimiento,
atrincherarse entre
las palabras y el verso
sentirse mas solo que nunca
y denigrarse al espejo
desatar ahora ya el ultimo nudo,
el que faltaba, el mas difícil,
sentarse un momento
aunque se sienta preso
o de bronca ya descompuesto
asesinar angelitos, robarles sus rosas
y mandar al carajo al mundo
para estirar bien los huesos
a veces hay que escribir sobre lo mismo,
sobre lo mismo de cada día,
y ya no tomarlo tan enserio
jugar un rato y dejarlo suelto
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