Lágrimas secas surcan cicatrices. Y se mezclan con los escombros de nuestra batalla.
Y al recordarte mi respiración se entrecorta... y forma oxígeno contaminado por auroras malditas. En las que te invoqué. Y tu saliva espectral pareció volver a agrietar mi piel.
Para luego desaparecer. Entre humo. Entre vapor. Entre los huecos de mi memoria.
Fantasmas
Creados por ti
Recreados por mi
Eternos en mi reloj.
Texto agregado el 20-07-2013, y leído por 134
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