Cruza y aire, que yo cierro. ¿Qué, que tienes tú la llave? ¿a dónde corro? ... ¿Nos quedamos todos? Toquen fondo... no hay más agua, solo fuego, solo fuego... no hay tesoro. Por lástima no lloro, las lágrimas... no son de felicidad. Ya no. Son de odio. Ojo a ojo, y hacia atrás... Que nos follen todos.
Texto agregado el 10-07-2013, y leído por 229 visitantes. (1 voto)