En una noche tan fría como oscura se oye a lo lejos el viento reclamar su espacio por más que me esfuerzo desde mi cabaña se me hace imposible la visibilidad así que decido abrirme paso entre la densa neblina atravesando cada árbol del bosque, de pronto escucho risas a lo lejos me detengo inclinando mi cabeza hacia un lado pero creo haber confundido el sonido del viento así que continuo mi camino.
El tiempo me paso por el frente y lo ignore por completo, cuando logro ver sus huellas me doy de cuenta lo tarde que es, así que decido volver pero ya el camino me ha jugado una broma al voltear todo lo que había dejado atrás era pasado y ahora debía enfrentarme a un presente desconocido, sin saber que hacer me detengo y decido seguir mis huellas era la única manera de volver sin problema alguno.
De pronto vuelvo a escuchar risas y exclamo molesto (ACASO TE ESTAS BURLANDO DE MI), pero no obtuve repuestas, estaba cansado las horas pasaban y yo aun me hacia perdido el bosque se había convertido en mi prisión y la maleza que me impedía caminar eran mis cadenas, a lo lejos vi lo que parecía ser una silueta pero se desvaneció de la nada solo agache mi cabeza tomando aire y dije estas palabras (dios ayúdame a salir de aquí)
De pronto me detuve a pensar por que había salido de la cabaña y fue una sensación de rabia conmigo mismo por que ni siquiera tenía la respuesta a mi pregunta, había saltado a la oscuridad sin tener un piso firme donde caer y ahora me hacia flotando en la nada, la impotencia se encontraba hablándome al oído, mientras que la desesperación me llevaba de la mano y lo peor es que me estaba resignando a no encontrar mi camino de vuelta y todo por …nada .
En ese momento me encontraba perdido, ya el frío hacia estragos en mi cuerpo cuando retome mi camino se me hacia mas difícil caminar, sentía que las piernas me pesaban como nunca antes, así que tome la decisión de descansar un poco al pie de un árbol, miraba a mi alrededor y solo veía árboles cubiertos por neblinas, trataba de ver el cielo pero las hojas de los árboles lo cubrían por completo, las horas se hacían cada vez mas lentas era como ver las agujas del reloj retroceder en vez de avanzar.
Me quede dormido sin darme de cuenta, aquella risa volvió pero decidí no prestarle atención ignorándola por completo, la risa duro un largo rato y cada vez se escuchaba mas y mas cerca de mi, llego un momento en que ya no se escucho mas, así que decidí retomar mi camino.
Cuando me dispongo a seguir una gota de agua viaja por mi cara pero no era el rocío de la noche, si no una tormenta que se disponía a caer sin piedad alguna, sobre mis hombros cansados, pensé que era lo peor que me podía suceder las preguntas comenzaron a rondar por mi cabeza como iba a salir de ahí ahora que el piso firme se convertiría en gelatina para desestabilizar mis pasos seguros.
La lluvia entro de manera inesperada, los árboles le dieron la bienvenida con los brazos abiertos, yo me encontraba totalmente mojado la ropa se convirtió en parte de mi piel adhiriéndose con fuerza a mi cuerpo, ya nada podía ser peor estaba en el punto donde todo se complicaba cada segundo aun mas.
A lo lejos vi una claridad no lo podía creer ya me estaba acostumbrando a la oscuridad de aquel lugar pero de pronto tenia la oportunidad de salir de aquel bosque, comencé a correr tan rápido como podía, cayéndome varias veces por el grueso pantano que cubría mis pies era como si la naturaleza me tomaran por los tobillos y me hubiera convertido en parte de su propiedad, corría y corría pero me parecía no avanzar lo suficiente para llegar a mi destino la lluvia se convertía en una pared frente a mis ojos, de repente la desesperación halo tan fuerte de mi que me desvanecí en la carrera cayendo en el pantano.
Esa noche los calambres me torturaron parecía que me estuvieran rasgando cada músculo de las piernas, el dolor me impedía seguir mi camino así que tome la decisión de esperar a que amaneciera para continuar.
El tiempo se burlaba en mi cara, mientras que el viento silbaba en forma de burla ellos tenían todas las de ganar y yo solo esperaría a ser derrotado ya no tendrían otra salida mas que esperar, si la luz del sol no traería consigo respuestas a mis preguntas todo estaría perdido, mi cuerpo ya estaba cansado de haber caminado toda la noche y mi mente comenzaba a jugar bromas de mal gusto.
Cerré los ojos por un momento, y escuche voces a lo lejos decidí hacer lo `posible para levantarme pero ya mis piernas no respondían como antes solo logre ponerme de rodillas sentía que el piso estaba cubierto de vidrios los cuales me estaban torturando las piernas cada segundo que pasaba en esa posición, sin lograr ver nada, luego de solos segundos caí sobre los pies del árbol que se había convertido en mi mejor amigo el estaba ahí para mi, así decidí contarle mi vida sentí que necesitaba hablar con alguien y el me escuchaba en esa noche tan fría y solitaria, le pedí permiso para colocar mis ultimas palabras en su tronco ayudándome con mis uñas a tatuar no por lo que me había pasado si no lo que había aprendido en una sola noche colocando estas palabras:
Cuando carecemos de lo material nos damos de cuenta de la importancia de las pequeñas cosas que a lo largo de la vida ni siquiera nos paramos por un segundo a ver o sentir.
Luego de escribir estas palabras, me quede dormido sin darme de cuenta, no se que paso o que fue de mi pero al despertar el sol acariciaba mi rostro no lo podía creer estaba muerto o solo había despertado de aquella pesadilla me parecía extraño estaba en mi cuarto como cada mañana todo era normal, así que descubrí que todo había sido un sueño o una terrible pesadilla de la que ya había despertado.
Como todas las mañanas llegue hasta la cocina para tomarme mi café cuando de pronto escuche a mi perro ladrar en el patio me pareció extraño por que no había nada ahí, así que Salir para averiguar que estaba pasando, cuando llegue al lugar, un frío extraño recorrió mi cuerpo de manera que sentía como viajaba através de mis venas, para mi sorpresa estaban ahí eran las palabras grabadas en el árbol las que me hicieron comprender mas que un sueño era una realidad que no estaba a simple vista, era una de esas pequeñas cosas que siempre pasamos por alto a lo largo de nuestras vida y tu que has pasado por alto hoy acaso lo sabes o aun no has encontrado tu árbol…
Dosantos
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