RELATOS CORTOS: EL DOCUMENTO
Al transcribir aquel documento estaba algo confuso.
Volvì a mirar el documento, y para verlo con mejor luz.
Me acerque el candelabro y no adverti que caia cera de la vela encendida.
Con lo que el papel se manchò y aquel documento oficial quedò impregnado
y cubierto por un goteròn de cera de aquel candelabro.
Me acordè de los remedios caseros de mi madre, y para enmendar aquel
desaguisado puse sobre el papel un trozo de melocotòn.
Al hacerlo, de aquel papel antiguo, sobresalio sobre el fondo otro documento.
Me quedè perplejo ante el hallazgo, mi metedura de pata, daba paso
a un documento quizàs mas valioso que el anterior.
Segùn mi opiniòn aquello habria que valorarlo, y me puse en contacto
con un colega experto en documentos antiguos.
Queria saber su opiniòn antes de contactar con el cliente.
Y en efecto aquella piciada encontrò soluciòn gracias a ella, el documento
secreto que estaba de fondo era màs antiguo, y valioso que èl anterior.
De està forma pude contactar con el cliente y darle la enhorabuena.
Y presumir que gracias a mi extensa experiencia, y utilizando, mis grandes conocimientos.
Pude dar con aquel documento que estaba cerrado para los ojos del mundo.
El cliente me felicitò, y respondiò con una generosa recompensa, y desde entonces
el trabajo y la fama como traductor se hizo notoria, y gracias a este suceso.
Aquel documento lleva mi firma y el prestigio de haber sido descubierta, por mi.
Con el sobrenombre de:... "La traducciòn del candelabro".