A veces pienso que el mundo ya no tiene cura.
Es en vano intentar ayudar a quien ya no quiere ayuda.
El hombre se transformó en su propio demonio devorador, se consume así mismo cual llamas del averno.
No puedo sentir tristeza, ya no.

No siento dolor , solo rabia, una rabia que no me lleva a ningún lugar.
Observo y veo la miseria de mis hermanos chorrear cual baba que todo lo impregna.
Intento limpiar un poco la mugre, pero un demonio mas viejo y antiguo viene y ensucia con la miseria de su alma.

Antes mis oraciones eran poderosas, cual espada afilada cortaban la oscuridad.
Hoy ya no. Ahora no son necesarias, no se necesita restaurar ningún equilibrio.
La Humanidad ha jugado sus cartas y ya no es necesario equilibrar la balanza del destino.
Estoy aquí para observar y vigilar a otras almas que aún persisten en hacerlo.

Ellas son valiosas y por ellas permanezco aquí, ayudando a otros como yo a que no las destruyan.
Queda poco tiempo, solo debemos permanecer despiertos y observar.
Muchos ya se han vuelto oscuros y algunos han muerto.

Los oscuros se infiltraron en todos lados, religiones, escuelas, gobiernos.
En la historia de los mundos en el gran libro del Universo, esto se repite una y otra vez.

Hay mundos donde solo reina la luz, la tierra estuvo a punto de ser uno de ellos, sin embargo los humanos son débiles al placer y por ese lado la oscuridad se aferró a ellos. Se hizo carne en su mundo y les ganó.
Las almas transmigran todo el tiempo a otros mundos y debemos escoltarlas, a veces estamos cansados sin embargo no tenemos tregua.

Está escrito que un día habrá paz cuando cada ser estelar se integre a la gran conciencia, más aún no es tiempo.
Los guardianes de las Esferas nos dan aliento, muchos como yo han caído porque nada resquebraja más el corazón que el sufrimiento que padecen los humanos por su ambición e ignorancia.
Más también recibimos alguna plegaria que nos conmueve de un niño o un anciano que ha abierto su corazón y nos ve a diario en nuestra tarea.

Muchos seres vivos de este mundo, como le llaman los humanos a Los Perros, Caballos y otras especies son nuestros aliados, sin embargo tienen mucho miedo y se están ocultando.
El hombre acomete contra ellos con más brutalidad y frecuencia que antes y actos de canibalismo son más brutales que antes.

La locura se ha apoderado de este mundo y lloramos sobre la tierra nuestras lágrimas.
Nos está prohibido interceder en el destino final de la especie y ella va hacia la auto destrucción.
Solo se nos permite interceder para proteger a quienes trabajan por la luz y son inconscientemente sirvientes y guardianes del conocimiento.

Algunos mueren por la causa y también a esa alma debemos escoltar hasta el portal de los tiempos donde renacerá en un maestro o un guerrero espiritual.

El hombre tiene más poder inclusive que nosotros y es un simple esclavo de las fuerzas oscuras.
Algunos líderes se han revelado y la única forma que ha encontrado la oscuridad de vencerlos ha sido destruyendo su cuerpo, sin embargo su alma a regresado innumerables veces para seguir sembrando un mensaje de esperanza.

La humanidad cada vez, se vuelve mas ignorante aunque su tecnología ha mejorado, se a apoderado de tecnología de hermanos de otros mundos más no sabe como utilizarla y damos gracias por eso, ya que de hacerlo la utilizaría para el mal ya que entre quienes trabajan con ella está infiltrada la oscuridad.

El final vendrá del gran sol, porque la luz siempre triunfa.
El que todo lo ve nos ha dicho que no está escrito un final, sin embargo el mismo está muy cerca.
Solo si se unen a la luz para vencer la oscuridad solo así le humanidad tiene una pequeña oportunidad de sobrevivir.

Cada día muere un poco más el gran espíritu, sus venas están contaminadas y sus pulmones ya casi no pueden aspirar la vida, el hombre se ha transformado en la gran plaga que como en tiempos antiguos todo lo devoró.

Hay muchos de nosotros sirviendo entre los hombres, algunos estamos en tiendas, en oficinas, en la calle.

Algunos Humanos nos han visto como somos y equivocadamente nos han querido venerar, más no somos apenas más que sus hermanos mayores.

El Oscuro siempre susurra en el oído derecho a los mortales, nosotros del lado izquierdo, cada día es una batalla y susurramos a muchos a diario.

Estoy cansado he pedido un tiempo para estar en el limbo y no me fue concedido, hay mucho trabajo me fue dicho y se me entregó una nueva misión.
Escribir esta carta pidiendo ayuda a los Humanos, contarles de nuestro trabajo y que aún están a tiempo.

Entonces si ya llegaste hasta aquí te pido que la difundas, que me ayudes a salvar este mundo que aún hay esperanza.

Tu luz es tan grande y tan poderosa sin embargo te crees tan frágil y tan débil y es de eso que se vale la oscuridad, de la ignorancia de quien en realidad tu eres.

En la luz te saludo y bendigo.
Con amor.

Gabriel.