Una figura de relieve del siglo XVIII en Lima, fue un autodidacta y fruto de la instrucción libre, don José Eusebio de Llano Zapata nació el año 1722 y fue un positivo valor de la cultura, dominaba 7 idiomas y eran sus conocimientos enciclopédicos, causando asombro en sus contemporáneos, sintió desprecio por la corriente filosófica llamada escolástica a la que consideraba senil, también por los prejuicios, supercherías y preocupaciones de su época a la que combatió con denuedo, impugno los métodos de la instrucción de ese tiempo con las siguientes palabras:

“todas son mentalidades, abstracciones y disputas inútiles, no se da un paso que no sea en esta parte una perdida de tiempo, malogro de la juventud y ruina de los ingenios; tropiezos casi inevitables y que siempre han de salir al encuentro a todos los que se mezclan en cuestiones que ni en lo físico, ni en lo moral traen algún provecho al espíritu de los hombres, pero si vuelven inútiles las operaciones del entendimiento, haciendo caer en insensatez furor y manía”.

Fue profesor libre de letras, latinidad y retorica, fue el primero en el Perú en enseñar Griego, de 1750 a 1755 visito América del sur, después paso a Europa y murió en España en 1789, dejo escrita su notable obra “ Memorias Histórico- Físico- Apologéticas de la América Meridional” que constaba de 5 tomos, pero solo se publico el primero que comprendía el reino mineral, a este tomo se le agregan 3 cartas, notables cartas criticas sobre asuntos de historia natural, política y literaria de indias, se dice que su correspondencia debió abarcar 6 volúmenes en octavo y se encontraban en la biblioteca nacional, incluía cartas familiares.

Para su época don Llano Zapata fue un rebelde, un inconforme ansioso de un mundo mejor, era dueño de una cultura morosamente cernida y bien tratada.