No es un engaño, Es mi forma de venerar el carbón de unas carnes aliñadas con ajo y con cerveza, Un lomo liso a la hora del almuerzo El chocolate que baña el helado, La fruta confitada del pan pascuero, La oliva del aceite... No somos un engaño, Somos simplemente el hambre del mundo, Y el agua que cultiva su veneno.
Texto agregado el 06-06-2013, y leído por 132 visitantes. (0 votos)