El ser humano tiene un sistema de vasos algunos estrechos que son vitales en el cerebro y el corazón. El taponamiento de ellos con basura es la causa fundamental de muertes en el mundo. Tal taponamiento no es posible si no ingerimos grasas de origen animal o de origen industrial como la margarina. Precisamente cuando a un paciente se le hace destaponamiento de las coronarias o cateterismo, es decir, aplicación de una sonda de fontanero pero quirúrgica y costosa no se le advierte que si sigue comiendo grasa la vida útil de su trabajo de fontanería es de tres años. Hay que volverla a hacer, hacer una cirugía de corazón abierto o sobreviene el infarto.
Si tomamos 6 alas de pollo y hacemos un caldo como el que nos gusta tomar y lo aplicamos por un equipo de venoclisis o de aplicar suero metiéndolo por la bolsa observaremos que en la manguera queda un taponamiento de grasa que escandaliza. Lo mismo con sancochos o pucheros. Cuando su cuerpo no es capaz de eliminar toda esa grasa sobreviene el infarto cerebral o del miocardio.