Hay plantas en la naturaleza que permanecen sanas casi todo el tiempo y ellas tienen conocimientos de combate biológico que si los leemos podemos utilizarlos en la salud humana, animal y vegetal. Miremos, por ejemplo, el buchón de agua el cual tiene una tasa de crecimiento de las más altas de la naturaleza y además permanece en medios húmedos y no es atacada por hongos. Esa planta diluida en agua y asperjada sobre los cultivos podría servir como fertilizante y antifungosa. La higuerilla crece vertiginosamente y es prolífica. Los guaduales son sanos y fértiles. La cidra es saludable e invasora, etc.
Hay campesinos que diluyen plantas en agua y fumigan o fertilizan con un éxito pasmoso.
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