Te estrecho nuevamente en mis brazos
Bebo de ti recónditos sabores
Hasta sentir tus frenéticos temblores
.
Y en el último aliento que te queda
Murmuras dulcemente
¿Que tan audaz te sientes esta noche?...
Te respondo, lo suficiente para probar
la mas dulce frutilla
Que me ofreces
Texto agregado el 24-05-2013, y leído por 260
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