Fue uno de los auténticos valores de la literatura nacional, nació un día del año 1896 y desde muy niño demostró sus profundas inclinaciones artísticas, acusando precoz inteligencia y singular capacidad asimilativa, igualmente podía deleitar su espíritu con la infinita belleza de la música, como cultivar su delicada y armoniosa voz de tenor que lo hizo conocido pese a su juventud.

Desgraciadamente muy pronto tuvo que cortar sus aficiones artísticas, ya que siendo su situación económica bastante modesta se veía obligado a hacer frente a la vida en toda su dolorosa exigencia, era un joven al que le gustaba la vida bohemia y decide salir en busca de nuevos horizontes, se dirige a Chile un día de tantos sin participar a nadie se marcho de la patria, desplegando gran simpatía y delicado ingenio muy pronto se granjeo la entrada a los salones y centros literarios en los que perfecciona sus dotes de escritor y artista.

En la capital Chilena logra mediante sus méritos ingresar al periodismo, profesión en la que continuo el resto de su vida, al poco tiempo de su estadía en la vecina republica del sur, sorprende a la critica al publicar una obra titulada “de perfil y de frente” en el que hacia un delicado estudio de los principales personajes del mundo político e intelectual Chileno, la publicación de este primer libro alcanzo bastante éxito, que revela mayor merito al pensar en la difícil situación por la que atravesaban nuestras relaciones con la tierra Araucana en esos tiempos.

Sus producciones tenían el marcado tinte de nuestra literatura, era un escritor irónico, con humorismo sabia enfocar puntos de gran actualidad, que con su gran imaginación cobraban extraordinaria gracia y amenidad, poco tiempo después publico su segundo libro titulado “en el sendero” que era un simpático ramillete de cuentos con el prologo de Luis Fernán Cisneros, que al hablar del autor lo hace en los siguientes términos:

“vive, palpita, atrae mas de lo que dice, que esta bien dicho, es elocuente lo que revela y anuncia”

Otras obras suyas son: “la voluntad del tedio” y “el mal de la duda”

Ismael Silva Vidal murió muy joven atacado de cruel dolencia, el Perú perdió con su deceso un recio temperamento, del que la literatura nacional esperaba obra alta y noble.