Una vaca se encuentra con sus compañeras como todos los días tomando el sol
después del almuerzo, unas gafas le hacen muy bien ya que está sugestionada
con lo del calentamiento global, entre charla y charla, Berenice, la de las gafas, le
dice a Lindsay – estos días me he sentido mal, no sé qué es, pero me duelen los
muslos – Lindsay con aspecto de doctora le responde – tómate una aspirina que
me dijeron que eso era bueno para todos esos malestares -. Berenice va a donde
su dueño, el señor Ceballos y le pide que si por favor le facilita esa medicina, ella
la toma y después de media hora siente como se le pasa aquella molestia –
tenías razón ya no siento ningún tipo de dolor – agradeció Berenice y se recostó
sobre el pastal, continuaron la conversación dialogando sobre la forma en la que
las ordeñaba su jefe, y las dos estaban de acuerdo en que lo hacía sin causarles
mayor problema y que era un regocijo para ellas dar la leche que tomaba toda la
comunidad pueblerina, éste es un día cotidiano para ellas dos y otras 20 vacas
más que hacen parte del hato – no es genial nuestra existencia, Lindsay, estamos
todo el tiempo aquí relajándonos, sin tener que reflexionar mucho acerca de la
explicación de la vida – le comentó Berenice; llevan más de 2 años juntas y son
inseparable aunque también se relacionan con todo el equipo, son parte del
ganado más primordial del sector, de allí se desprende lo principal de toda la
industria lechera para la sociedad; obviamente hay muchos más hatos pero el que
tiene mayor ventaja es éste.

Así pues, el ganado no es el único tipo de animal que sobrevive en aquel lugar,
también hay aves, gatos, perros y en la tierra que a veces se malogra habitan
varios tipos de gusanos, uno de ellos se llama Drake y se la pasa todo el tiempo al
lado de su hermano Mateo, adentro del primero habita Sarita, una bacteria
carnívora que ha encontrado la forma de sobrevivir en distintos ambientes y dentro
de Drake no fue la excepción; Sarita es muy solitaria, llegó a este campo por un
aeroplano que hacia maniobras de entrenamiento allí, el piloto tenía una pequeña
planta con su matera, estaba muy contento y eso lo llevó a botarla al suelo, allí iba
Sarita, que había sido separada de sus padres; posteriormente ella ingresó en
Drake pero por muy poco tiempo ya que su alimento vital es la carne y estaba
planeando la forma de ingresar en alguna de las reses para poder sobrevivir, tenía
un plazo de 7 días antes de que empezara a agonizar, ya llevaba 4 días dentro de
Drake, hizo eso para tener mejor cobertura pero su verdadera intención estaba
puesta en la raza bovina; había entrado dentro de Drake mientras éste comía algo
de hierba.

Mientras Drake y Mateo conversaban, Sarita decidió salir de allí, lo que le produjo
a él una tos atroz, no obstante ella logró su objetivo y empezó a arrastrarse entre
la tierra; se hallaba a unos 20 metros de Berenice, en menos de una hora ya
estaba a los pies de la res y emprendió su trayectoria hasta la boca, porque por
allí entraría hasta tomar el control de todos los sectores carnudos. Pasaron dos
días más y Sarita inauguró su accionar dentro de Berenice, comiendo algo de sus
muslos, pero como la porción era tan mínima, el animal no se dio cuenta, además,
lo más grave era que ese hato completo iba a ser sacrificado para abastecer las carnicerías del territorio.

En el pueblo habita la familia Manson, todos sus miembros son vegetarianos
menos la joven Mariana quien es adicta a la carne, ella puede comerla en todas
sus versiones, la mamá de ella, Adela, siempre tiene que comprarle sus porciones
aparte de los vegetales que adquiere asiduamente, entretanto Sarita ya había
inspeccionado todo el cuerpo de Berenice y decidió instalarse en el muslo
izquierdo, de allí obtendría comida por lo menos para los próximos 6 meses. El
dueño del hato inició la matanza del ganado y allí estaban incluidas Berenice y
Lindsay, éstas no pudieron cambiar su hado y finalmente terminaron en la fama
Hoyos, la principal de la ciudad; de alguna forma Sarita descubrió la forma de no
ser expulsada y se quedó anexa en un suculento fragmento de carne, aquel que la
señora Adela compraría para su hija.

Adela era una mujer que utilizaba muchas técnicas de higiene en la preparación
de los alimentos, Sarita desplegó todas sus tácticas para no ser quemada durante
la cocción que se le hizo al trozo de alimento; sin ser vista salió de la paila en la
que estaban preparando la carne asada y antes de que fuera servida a Mariana se
sumergió entre una salsa que recubría la carne y se dispuso en el medio de la
ración para asegurarse de que fuera tragada; esa cena fue común y corriente,
Mariana no sospechó que estaba firmando la sentencia de su muerte, entretanto
que Sarita se aseguraba un lugar dentro del cuerpo de ella; aunque no fue sencilla
su entrada en el estómago puesto que tuvo que luchar con varios enemigos que
batallaron para exterminarla, finalmente se asentó en su pierna derecha y allí
nació su plan de guerra para zanjar su propósito. Sarita es un tipo de bacteria
particular que tenía padre y madre pero que también se podía reproducir
individualmente, por lo que al haberse instalado, comenzó a repartir sus
descendientes por todo el territorio a su alrededor, esto fue que en un mes ya
había tomado los dos miembros inferiores con alrededor de 1000 sucesores, sin
embargo, Mariana aún no lo percibía bien, solamente tenía unos ligeros dolores
pero no prestó mucha atención.

Sarita reunió a sus vástagos y éste es un fragmento de su declaración: Mis
queridos ejes, desde muy pequeña fue instruida para esta gran misión, es esto o
morir, eso fue lo que me enseñaron mis padres, ahora tenemos que invadir las dos
extremidades inferiores de esta mujer, no tengan compasión, pueden estar
terminando cuando vean los huesos, ahí nos trasladaremos a una próxima
víctima, muy bien, ahora dispérsense. Ya habían pasado 3 meses desde la
entrada de Sarita dentro de Mariana y ésta última decidió ir al médico debido a sus
constantes dolores en sus piernas; la atendió el doctor Castañeda quien logró
identificar lo que le sucedía – hay una serie de bacterias carnívoras invadiendo su
cuerpo, tiene dos opciones, esperan a que la terminen de atacar o cortar las dos
extremidades inferiores – aseveró Castañeda, dejando indómita a Mariana, no
obstante ésta se calmó y dejó relucir su deseo de vivir – hágalo doctor, lo que sea
necesario para preservar mi vida -. En 15 días Mariana fue operada
satisfactoriamente y sus fragmentos fueron retirados a la basura, ella que contaba
con 20 años alcanzó a vivir 42 años más en esa condición y murió un poco
entrada en su vejez, pero ¿Qué pasó con Sarita y su ejército? Pues resulta que la
empresa de aseo dejó botados los restos cerca de un nuevo ganado, entonces
Sarita y su milicia se preparan de nuevo para embestir…