Te conocí… te odie… deseaba no verte, cada que te encontraba mi estomago se revolvía y sentía ganas de golearte. Sin notarlo la gran mayoría de mi tiempo la gastaba pensando en lo mucho que me gustaría no haberte conocido nunca… ahí fue donde empezó mi error… de tanto pensar en ti, en mi nació un sentimiento extraño… los días empezaron a pasar y con ellos te fui viendo diferente; te habías vuelto un hombre hermoso ante mis ojos… todo lo que en ti veía, todo aquello que solía detestar, ahora me gustaba, verte era una de mis cosas favoritas, escuchar tu nombre era para mí como una suave melodía… eras la primera persona con la que me pasaba esto… pensar en ti me hacia sonreír aun incluso si estaba llorando… sentía nervios cuando oía tu nombre, cuando te veía pasar a lo lejos desde mi ventana… sentí escalofríos, mis rodillas temblaban, mi voz se volvía destemplada, me sudaban las manos y sentía mi rostro arder de vergüenza… fue en ese momento cuando me di cuenta; te amaba… me había enamorado de la persona que mas despreciaba… amaba todo de ti aunque fuera malo… no me importaban tus defectos, eras lo que más quería en aquel momento, ahí empezó mi sufrimiento, quería complacerte y hacer que me amaras como yo a ti, pero no lo conseguí… eras tan superficial y miserable… me usaste… me enamoraste y quisiste aprovecharte de mi… pero al ver que no lo conseguirías, simplemente me despreciaste y me tiraste como si fuera basura… ante tus ojos no valía nada… te había entregado todo de mi… mis sueños, mis anhelos, mis fantasías… todo.
Luego de que te fueras quede vacía, sin nada más que mi soledad haciéndome compañía; inventaba personalidades para sentirme más acompañada… personalidades que no eran más que espejismos dañinos de mi tristeza y depresión… me desespere a tal punto que quise acabar con mi vida… pero tú no valías la pena, ya no mas… habías sido mi primer amor… pero no acabaría con mi futuro por alguien como tú.
Ahora que el tiempo ha pasado me he vuelto fuerte y resistente ante el dolor; ya no agachare mi cabeza nunca más ante personas como tu… ya no te odio, cuando pienso en ti solo pido al cielo que logres ser feliz… mientras tanto pido también encontrar mi felicidad… algo que me haga sentir viva nuevamente… no importa si las plegarias son solo palabras lanzadas al vacio… prefiero eso antes que caer nuevamente en depresión, al recordar que gracias a ti mi corazón permanece roto en pedazos…
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