Para un día...
Cual pétalo, se deshoja en el frío...
Hoy yo me caigo en blando pasto tierno...
Somos dos locas, inseparables... seres... soledad y yo.
Pero él... escucha amiga de pena; el individuo más ajeno a todo...
Del que menos creí!...
Es extraño.
Por que contrario a todo, se llevo en menos de un sol,
Lo que a otros les cuesta aun.
Cual mago rompió el frío y el miedo tomo un sabor
A boca de niño en cuerpo de hombre.
Son suspiros los que no me dejan respirar...
Y es que él me hizo el regalo más gracioso... del que más temía.
Me dio el valor para verme como una mujer.
Son las alas... que desde nunca, nunca quise ver...
Me enseño, y lo extraño es que él, no sabe volar...
Pues tal animal... huyó de mí cuando sus sentidos gritaron mi nombre,
Si en esas noche cuando el cuerpo suyo buscaba mi suave dolor.
Quise creer que podía, que llegaba allí donde,
Muy pocos creyeron llegar... ese lugar donde la fuerza lleva tu nombre.
La sensación me come el alma... y es entonces que creo...
Que no es tan pasajero, este emotivo sentir.
El calor del fuego abraza el frío de mi corazón.
Pequeño... Amor de no mi amor... haré de ti lo mismo... que a otros;
Mirare al suelo, llamare a mi fiel amiga, para que no vuelva a creer
Que puedo ser de amar.
Me recuerde... no!
Que no se puede ser feliz... otra vez.
Te veré como a un demonio, romper... las romperé,
Las abrazadoras noches de fuego que guardo en mi...
Encenderé la lluvia, y más aun, apagare el sol, pues no quiero sentir
su calor... no quiero pensar que se puede... para que...
Si al más mínimo sentir me creo humana, me siento mujer... entonces,
Y el dolor vuelve a acariciar, mis cabellos de negro brillar.
Mi mirada baja una vez mas, “resígnate pues tu no tienes que soñar”
Deja de ambicionar... pues en esta vida... no hay mas para ti mujer de cartón.
Doblad, doblad en ti el sentir... déjalo para cuando mueras, y veas que de tu
Vida, no hay mas nada que decir... sentirás dolor, las veras al... y otros...
Y te arrodillaras... - y así fácil... lloras... lloras, - dejadlo ir...
No vuelvas a sentir... dejadlo ir... que como los vientos alisios...
Volverá a ti... más tu, de tu gruesa caparazón nunca mas vuelvas a salir.
Mujer... del dolor.
Para un día... no mas...
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