EL LORO CAMPANA
El loro campana treta, y treta, por los palillos de su jaula.
No se deja amedrentar por el gato lucifer, tambièn inquilino
de la casa de su ama, al que tiene tambièn alimentado,
que le cuesta moverse sin arrastrar la panza cuando anda
por todos los recovecos de la casa incluida la cocina.


Entre el loro campana, y el gato lucifer hay viejas rencillas.
En mas de una ocasiòn cuando lucifer era joven.
Estè intento comerse al loro campana, llamado asi por su dueña.
Porque no paraba de imitar a las campanadas de la Iglesia del pueblo.


.El loro campana siempre esquivò los ràpidos reflejos de aquel gato
AL ser frustradas las intenciones de aquel gato estè en su empeño
siempre rompia alguna cosa, con lo que el ama lo mandaba
a dormir fuera de la cocina, y de està forma el loro campana.
Se libraba de su persistente, constancia y ganas de comerselo vivo.


La tolerancia de su ama era de verdad generosa, pero todo
tiene un limite, aquella dulce anciana tenia una alcancia,
regalo de un familiar muy querido, era de porcelana.
Y tenia la imagen de un Pavo Real de plumaje muy llamativo.


La anciana dejaba de vez en cuando al loro libre de su carcel
enjaulada y permitia que campana su querido loro, volarà en libertad.
Lucifer sabia està extravagancia de su ama, y siempre esperaba
impaciente el menor descuido de su dueña, para atrapar a campana.
.
La buena anciana dejò libre a campana que volara por la casa.
Y se fue a hacer unos recados cuando volviò se encontrò
todo patas arriba como en otras muchas ocasiones.
Sabia que lucifer habia estado haciendo de las sullas y se
fue corriendo a ver si su loro seguia con vida.
El loro se encontraba dentro de su jaula todo despeluchado.
Señal inequivoca de su dura batalla contra su gato lucifer.


Lucifer se encontraba reposando en su cama con trozos de plumas
en su boca, pero lo que mas molestò a la anciana.
Fue que su alcancia de porcelana y su pavo de plumas de colores.
Estuviera estrellado contra el suelo, y todas las monedas que
con tanta paciencia fue acumulando estuvieran esparcidas por
todo el comedor, esto fue la gota que colmó el vaso.


Desde entonces el loro campana vuela en libertad por toda
la casa, mientras que lucifer el gato comilón.
Vive y duerme en una jaula de loro de grandes dimensiones.
Sin ni siquiera poder salir a estirar en este caso sus lindas patitas.
La penitencia dura ya mas de un año, lucifer a perdido el gusto
por comerse a campana desde que viven enjaulado.


Su dueña la venerable anciana ha debido de perder un poco la cabeza.
Pues no para de llamarlo campana a su lindo gatito enjaulado.
Y en cambió al loro lo acaricia dulcemente, y le llama mi gatito lucifer.
Lo que en principio pensó era un castigo, por su mal comportamiento.
Se ha convertido en una terrible pesadilla, su ama ha perdido el juicio.


Solo lo alimenta de alpiste, y comida de pájaro, y al loro
le da comida de gatos y en alguna ocasión, algún trozo de filete de pollo.
La venerable anciana se sienta en su sofá con su gato lucifer( el loro).
Al que compró un collar para sacarlo a pasear, mientras tanto
lucifer sigue enjaulado en la cocina comiendo alpiste sin parar.

Lucifer ha adelgazado tanto, que ya entra y sale de su jaula.
Se come la comida del loro, y el loro la de su jaula.
Anda como quieren por toda la casa, al final se han hecho amigos.
Lucifer recuperò su papel de gato, y el loro campana el suyo.
La que no se ha dado cuenta del cambio, es la venerable anciana.
La pobre sigue como si no hubiera pasado nada, la edad y los años.
Y su delicada salud mental la hacen vivir fuera de la realidad.