El PAÍS de los cerrazónicos, donde por las tardes el “ mate” se encarga de sembrar diálogos entre tanto, y de paso abandonar las actividades matutinas.

La REPÚBLICA en la que abunda el después, el mañana te pago, el chisme infame. También, nosotros el pueblo, la multitud, nos acostumbramos a vivir de manera monótona, de arcaicos ideales, pero sutilmente subidos a viaje.

La TIERRA de los abreviados, el lugar de recursos obsoletos, donde por cortar calles y sembrar pánico comemos al día.

ARGENTINA...suelo viscoso y malsano de hipocresía barata, discursos huecos y de ensayo previo. El susodicho se las lleva por el lado del deporte, se las trae a la hora de los tangos de GARDEL y se las compra con el Grato CORTAZAR.

En mi país nada se regala, nada es gratis, todo es un canje... esto x aquello, donde el bohemio yace solemne y las celdas repletas de ignorancia. Nosotros, los ARGENTINOS, carecemos de humanidad, parece que gozamos contaminando nuestras calles x no botar los excrementos donde corresponde.

La constelación de ira se alza día a día, la dejadez se pone en marcha y el mando esta a cargo del poder, los de arriba tienen el motor. Tomados de la mano van la ley y el hurto, la morada dejó de ser un refugio y empiezan a escasear las sonrisas.

ARGENTINA.... la tierra del nunca jamás, según PETER PAN ( ya saben por que lo digo), país de gente sin sombra, dónde para sobrevivir se trabaja de luna a luna.
Mi TIERRA, mi preciado tesoro... entregado con moño y todo al NORTE, menospreciado al hablar de seguridad, pero afable cuando se gustosos platos se trata.

Choca al pensar en futuro, acongoja vivir el presente y es triste al resumir tanta infamia adquirida.

SOLO UN PUNTO DE VISTA...